El vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, sopesa dar la batalla contra Arrimadas

M. E. Alonso MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Francisco Igea, en una imagen de archivo
Francisco Igea, en una imagen de archivo JCYL| EUROPA PRESS

Deja su cargo en la dirección regional de Cs y advierte que irá a las primarias si no cambia el modelo de partido

16 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Las aguas bajan revueltas en Ciudadanos. A dos meses de que los liberales designen a su líder, la destitución esta semana de dos de las voces críticas con la dirección ha sacudido la vida interna del partido. La gestora creada tras la marcha de Albert Rivera acordó, pese a su interinidad, cesar como portavoces autonómicos al asturiano Ignacio Prendes y a la castellano-manchega Orlena de Miguel con el pretexto de que no ostentan cargo institucional alguno. La decisión provocó una cascada de renuncias orgánicas entre los responsables regionales y provinciales como señal de protesta. Entre ellas, la del vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, quien dejó su puesto de secretario regional de programas.

El barón díscolo de Ciudadanos, que en un principio anunció su apoyo a Inés Arrimadas, sopesa ahora dar la batalla en las primarias de marzo si esta no cambia el actual modelo de partido. «Si su modelo es este, nos presentaremos para presentar otro», aseveró ayer Igea en una entrevista en la cadena Ser.

El dirigente autonómico nunca se ha mordido la lengua a la hora de decir lo que piensa sobre las decisiones de la cúpula naranja. Acusó de «pucherazo» a la dirección cuando se presentó a las primarias de Castilla y León, votó en contra del veto a Pedro Sánchez y ahora le duele la deriva que está llevando la formación. Igea defiende que para «resolver la crisis» que atraviesa Ciudadanos desde el 10N debe haber un debate profundo. Reclama acabar con el centralismo de la etapa de Rivera y que sean los afiliados quienes elijan a sus líderes regionales. Así se lo trasladará a la propia Inés Arrimadas, que desde que es aspirante a liderar el partido se ha desmarcado de la gestora, en una reunión que confía en cerrar en los «próximos días». 

Justificaciones y apoyos

Ante el malestar generado, el presidente de la gestora, Manuel García Bofill, justificó los ceses de los portavoces por la necesidad de adaptar, de cara al cónclave, las estructuras de los comités regionales amparándose en los estatutos.

Pero ese argumento no se entendió y varias fueron las voces en el partido que dieron su apoyo a los destituidos. El exsecretario de programas y exportavoz de economía en el Congreso, Toni Roldán, manifestó su apoyo a Prendes. El exportavoz en el Parlamento de Baleares y portavoz del comité autonómico en esta comunidad, Xavier Pericay, consideró que a Prendes y a De Miguel «se los purga de sus cargos de portavoces autonómicos por tener voz propia». «Lo demás son excusas de una gestora que, lejos de ser consciente de su interinidad y actuar en consecuencia, pretende silenciar toda discrepancia presente y futura. Mal vamos», escribió en Twitter Pericay, quien renunció a todos sus cargos en Cs el pasado julio.

Igualmente, la exmiembro de la ejecutiva nacional Patricia Reyes, que compartió la Mesa del Congreso con Prendes como secretaria cuarta, ha lamentado su destitución: «Asturias pierde un gran portavoz, un buen compañero y una excelente persona.».

Estas reacciones se suman a la del líder de Cs en el Parlamento Europeo, Luis Garicano, quien elogió a los dos dirigentes cesados y defendió que «deberían jugar un papel importante en el futuro».