Media docena de encuestas coinciden en el retroceso del PSOE de cara al 10N

Luís Pousa Rodríguez
Luís Pousa REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Pedro Sánchez, con la delegada del Gobierno en Cataluña, este lunes, durante su visita a Barcelona
Pedro Sánchez, con la delegada del Gobierno en Cataluña, este lunes, durante su visita a Barcelona Jesús Diges

Los disturbios en Cataluña se traducen en un fuerte crecimiento del PP en los sondeos

21 oct 2019 . Actualizado a las 21:54 h.

Pedro Sánchez decidió apostarlo todo a la repetición electoral. La estrategia de los gurús de la Moncloa y Ferraz se basaba en vender el discurso de que Podemos y Ciudadanos eran los culpables del regreso a las urnas el 10N y reabsorber los votos de los descontentos con la nueva política para negociar luego los apoyos a un Gobierno en solitario desde una posición de fuerza que impidiese a Iglesias y Rivera volver a bloquear su investidura. La decisión de dejar correr el reloj fue arriesgada, y ya asumía que muy probablemente el PP se viese beneficiado por un escenario de tímida resurrección del bipartidismo. Pero con lo que no se contaba era con la distorsión que introduciría Cataluña en esta ecuación. 

EL FACTOR CATALÁN

Suben los partidos que recetan mano dura. Tal vez los fontaneros socialistas no hayan medido con la debida precisión el factor catalán. Las protestas callejeras en Barcelona y las imágenes del centro urbano transformado en un campo de batalla han empezado a reflejarse en las encuestas. Seis de los más recientes sondeos ya apuntan a que el PSOE no solo no aumentaría su representación en el Congreso de los Diputados, sino que esta se vería mermada en beneficio del Partido Popular y Vox, las dos formaciones más a la derecha en la escala ideológica y, por tanto, las que con más empeño están recetando mano dura para frenar las algaradas. 

el bipartidismo

Ascenso del PP y caída del PSOE. Entre los últimos sondeos solo uno, el realizado por GAD3, augura que el PSOE se mantiene en sus 123 escaños actuales. Es el pronóstico más favorable para Sánchez, aunque le concede al PP un crecimiento de 36 diputados (con lo que se situaría en 102). Todas las demás encuestas colocan a los socialistas por debajo de los resultados del 28 de abril: 120/122 (NC Report), 121 (Sigma Dos), 119 (Sondaxe) y 117 (Celeste-Tel y Hamalgama Métrica). En paralelo, el PP sube en todas ellas, pasando de los 66 escaños del 28A a un mínimo de 87 (Sondaxe) o a un máximo de 104/105 que calcula NC Report

Ciudadanos

Rivera se hunde. A pesar de que, al igual que PP y Vox, la formación de Albert Rivera también reclama actuaciones contundentes en Cataluña, Cs no logra frenar la sangría de votos que prevén todas las encuestas. Cuatro de ellas lo sitúan ya como quinta fuerza política, por detrás de PSOE, PP, Podemos y Vox, y todas cifran su desplome en, al menos, un recorte de 30 diputados sobre los 57 que tenía en la pasada legislatura. Los sondeos más duros son los de Sigma Dos, que le otorga 19 puestos en el Congreso, y GAD 3, que le concede tan solo 18. 

Unidas podemos

Una caída más controlada. Menos brusca, aunque importante, es la caída de Unidas Podemos, que expiaría en las urnas su cuota de responsabilidad en la repetición electoral e incluso su política en Cataluña, donde la polarización entre independentistas y constitucionalistas dejaría a los comunes en tierra de nadie. De los 42 diputados que obtuvieron el 28A, los de Iglesias perderían entre seis y once

Vox

Ya aspira a ser la tercera fuerza. Más sorprendentes resultan las expectativas generadas por el partido más a la derecha del espectro ideológico. De los 24 puestos en el Congreso que tenían en la anterior legislatura, los de Santiago Abascal pasarían a un máximo de 36, que les concede Sigma Dos, o 33, que les otorga GAD3. En ambos casos, Vox sería la tercera fuerza en el hemiciclo, haciendo su particular sorpasso a sus dos compañeros de la nueva política: Ciudadanos y Unidas Podemos.

 MÁS PAÍS

Errejón inclina la balanza hacia la izquierda. Entre cuatro y siete diputados sumará Más País. Los suficientes para que el bloque de centro-izquierda tenga más apoyos que el centro-derecha.