Sánchez endurece su vacío a Iglesias con la negociación de la investidura

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, durante su visita a la zona devastada por las llamas en Gran Canaria
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, durante su visita a la zona devastada por las llamas en Gran Canaria Elvira Urquijo A.| EFE

El PP y Ciudadanos confirman que no se moverán y ya piensan en otras elecciones

23 ago 2019 . Actualizado a las 08:36 h.

Pedro Sánchez parece no tener ninguna prisa por acelerar las negociaciones de cara a un nuevo asalto a la investidura tras su fallido intento de finales de julio. Cuando resta un mes para que se disuelvan las Cortes en caso de que ningún candidato logre la confianza del Congreso, el presidente del Gobierno en funciones mantiene su sepulcral silencio. Y eso que se vio obligado a adelantar su descanso estival en Doñana un día antes de lo previsto, ya que ayer se trasladó a Canarias para interesarse por los incendios que han devorado Gran Canaria en los últimos días. Pero a pesar de la insistencia de los periodistas, Sánchez no dedicó ni un solo segundo al bloqueo político. «Ya habrá tiempo», contestó a las preguntas de la prensa.

Fuentes del equipo negociador de Unidas Podemos consideran que precisamente lo que no sobra es tiempo, por lo que consideran que la parsimonia del jefe del Ejecutivo solo puede interpretarse como un nuevo intento de que fracase un acuerdo para la investidura y, «por puro interés partidista», abocar a España a una repetición electoral.

A pesar de no pagar la cuota del partido, el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, se erigió ayer en portavoz del PSOE al rechazar estas acusaciones: «El PSOE no quiere elecciones». El exmagistrado de la Audiencia Nacional insistió en que el partido «trabaja seriamente» en la formación de un «Gobierno progresista con un programa progresista», descartando la entrada de representantes de Podemos en la Moncloa. «Lo que no es factible y no es posible es que unos quieran que en un Gobierno haya dos Gobiernos», remató. 

Recupera su agenda oficial

Incendios aparte, Sánchez retoma hoy su agenda oficial presidiendo la reunión del Consejo de Ministros tras el parón del pasado viernes. El domingo estará en Biarritz (Francia) para asistir en calidad de invitado a la cena oficial de la cumbre del G7, que se reúne este fin de semana en la localidad del País Vasco francés.

Se especula con que esta visita pueda hacerla encajar con el encuentro que tiene pendiente con el máximo dirigente del PNV, Andoni Ortuzar, programada como punto de partida para el resto de encuentros con los demás líderes cuyos partidos tienen representación parlamentaria, de cara desbloquear la investidura.

Se desconoce si Albert Rivera volverá a rechazar por tercera una invitación, pero el presidente de Cs en el Parlamento catalán y miembro de la ejecutiva nacional del partido, Carlos Carrizosa, volvió a reiterar ayer que no cuenten con ellos: «No vamos a cambiar, no vamos a investir a Sánchez. Que deje de hacer teatro y de marear la perdiz», dijo. En el PP tampoco le prestarán sus votos, y empiezan a «intuir» que Sánchez ya ha decidido que irá a elecciones: «Nos está engañando a todos», exclamó la diputada Cuca Gamarra.