Sánchez apremia a Iglesias a que elija gobierno de cooperación en julio o urnas

g. gorriarán / a. azpiroz MADRID / COLPISA

ESPAÑA

 El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y la secretaria de Internacional del partido, Idoia Villanueva, con embajadores y diplomáticos europeos
El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y la secretaria de Internacional del partido, Idoia Villanueva, con embajadores y diplomáticos europeos Twitter Pablo Iglesias

El líder de Unidas Podemos busca apoyos de la UE para forzar una coalición

29 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Pedro Sánchez y Pablo Iglesias no ceden ni un milímetro. El presidente del Gobierno se la va a jugar a todo o nada en el debate de investidura en julio y apremia al líder de Unidas Podemos a que diga si acepta el gobierno de cooperación. Este vaticina que esa obstinación conduce al fracaso y desdeña la amenaza de elecciones. Sería «una irresponsabilidad», afirma.

El candidato socialista, explicó la portavoz gubernamental, no se va a echar atrás por falta de apoyos. «Vamos a poner el reloj en marcha en julio», dijo Isabel Celaá, quien también ratificó que la idea de Sánchez no es ir a una segunda vuelta. «Ningún buen alumno -explicó- lleva sus notas a septiembre». Además, acotó, si no hay acuerdo ahora es improbable que pueda cerrarse dos meses después.

El Gobierno ha puesto toda la presión sobre Iglesias. Pero a día de hoy solo el diputado regionalista de Cantabria ha garantizado su respaldo. Otros eventuales aliados no pasan de la abstención: PNV, Compromís, ERC y EH Bildu. Los 42 diputados de Unidas Podemos tienen la llave porque sumarían 165 con los socialistas. Pero Iglesias se niega si no hay gobierno de coalición. Y Sánchez insiste: no habrá ministros que no sean socialistas o independientes escogidos por él.

En el PSOE confían en que Iglesias no repetirá la «jugada» del 2016, cuando privó a Sánchez de la investidura. Celaá explicó que la propuesta del PSOE es «de calado» y lamentó que no haya dado una respuesta. Sánchez le ofreció: acuerdo programático, ser socio parlamentario preferente y cargos intermedios. 

Nuevas elecciones

«Tiene que quedar claro que el Gobierno no quiere ir a elecciones», puntualizó Celaá, y dejó caer que los sondeos apuntan a que el PSOE saldría beneficiado. Iglesias no da pábulo a esa amenaza. Un farol, dice, porque el presidente, aventuró, «no cometerá la irresponsabilidad de obligar a los españoles a votar otra vez por la obsesión absurda» de tener un Gobierno monocolor.

Este viernes, en una reunión con una veintena de embajadores europeos, Iglesias defendió las bondades de los gobiernos bicolores «progresistas» como el que propone. Esta reflexión no gustó nada en la Moncloa porque, advirtió la portavoz, «no se necesitan mediadores» para acercar posiciones.