El dueño del terreno de Totalán donde murió Julen pide un careo con el padre del pequeño

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

David Serrano está investigado por homicidio imprudente en el caso del pequeño Julen
David Serrano está investigado por homicidio imprudente en el caso del pequeño Julen Daniel Pérez | EFE

La defensa de Serrano, investigado por homicidio imprudente, quiere esclarecer si el progenitor conocía las prospecciones que había en la finca

06 may 2019 . Actualizado a las 12:15 h.

El dueño de la finca de Totalán (Málaga) donde está el pozo en el que murió el niño de 2 años Julen el pasado 13 de enero ha pedido un careo con el padre del pequeño, José Roselló, para esclarecer si el progenitor sabía que en el lugar había tres prospecciones.

El letrado que representa a David Serrano, el único investigado por homicidio imprudente, ha presentado un escrito en el que solicita un careo con el padre de Julen para determinar si este fue avisado de la existencia de las prospecciones que había en el lugar como mantiene el dueño del terreno. José Roselló aseguró el pasado marzo ante la jueza instructora que ni él ni su esposa fueron advertidos con antelación del peligro por parte de David Serrano.

El padre de Julen admitió no obstante que cuando ya estaban en la finca cogiendo leña para el fuego con el que iban a cocinar, Serrano le advirtió de que había varios pozos pero le dijo que estaban bien tapados y ello le tranquilizó.

Este escrito ha sido cursado por el letrado este miércoles después de que la titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga solicitara a las partes personadas en el procedimiento que se pronunciasen sobre la solicitud de nuevas diligencias.

Además del careo con el padre de Julen también ha solicitado otro careo con el empresario que ejecutó el pozo y que aseguró ante la jueza instructora que cerró la prospección con una piedra y tierra.

La defensa del dueño del terreno quiere que se investigue todas las contradicciones que han podido incurrir, a su entender, tanto el padre de Julen como el pocero durante sus declaraciones ante la Guardia Civil el día que ocurrieron los hechos y posteriormente ante la instructora y que perjudican a su cliente.

Un tercer careo que ha solicitado es entre el pocero y su ayudante «en aras de esclarecer ciertos interrogantes», según el escrito, al que ha tenido acceso Efe.