Oriol Pujol, investigado junto al resto de su familia en la causa por la fortuna oculta en Andorra que instruye la Audiencia Nacional, pactó el pasado mes de julio con la Fiscalía Anticorrupción una condena de dos años y medio de cárcel, con lo que evitó ser juzgado por un jurado popular y, de paso, libró de toda responsabilidad penal a su mujer, también señalada en los autos.