«Se asemejaba muchísimo al inicio del conflicto vasco»

La Voz

ESPAÑA

22 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Un agente de la Guardia Civil relató este jueves ante el Supremo el ambiente que se encontraron en el registro de las naves de Can Barris (Barcelona), donde el 19 de septiembre del 2017 los funcionarios hallaron 9,9 millones de papeletas para el referendo ilegal del 1-O. «La gente estaba exaltada. No he vivido el conflicto vasco, pero mis compañeros veteranos me han dicho que su inicio se parecía muchísimo por la cara de odio de la gente». 

La sesión estuvo plagada de testimonios sobre los registros de la operación Anubis, puesta en marcha por un juzgado barcelonés contra los promotores de la consulta. Y los funcionarios, que admitieron que los Mossos en la mayoría de los casos se emplearon a fondo para contener a las masas, no ahorraron en detalles. «Se me grabó la cara de odio de un señor mayor, que nos escupió. Parecía que le estuviéramos quitando algo». «Hubo amenazas: Os mataremos», declaró ese mismo testigo. «La salida fue una ratonera. Era una calle en obras y tiraron las vallas para impedir el paso», recordó un segundo agente que participó en el registro de las naves. 

Insultos y escupitajos

«No he visto una cosa así en mi vida. Estaban organizados», señaló un cabo primero que estuvo en la nave de Unipost de Tarrasa, donde se halló material electoral. «Nos empezaron a insultar y a escupir. Nos llamaron asesinos e hijos de puta», recordó otro agente sobre el 1-O en Sant Andreu de la Barca. «Había ocho mossos que no hicieron nada. Un manifestante le mordió la mano a un compañero. Montaron un muro infranqueable de 300 personas en el punto de votación», destacó para resaltar la gran resistencia que hubo.