Ciudadanos ficha a exdirigentes del PP y del PSOE para alardear de transversal

ramón gorriarán MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Silvia Clemente junto al secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas
Silvia Clemente junto al secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas NACHO GALLEGO | EFE

Incorpora a la popular leonesa Silvia Clemente y al socialista balear Joan Mesquida

26 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras la foto de Colón y el veto a los pactos con el PSOE, Ciudadanos quiere demostrar que el giro a la derecha que le atribuyen no es tal. La solución, dos fichajes a izquierda y derecha para recuperar su condición de partido transversal. La expresidenta popular de las Cortes de Castilla y León Silvia Clemente y el socialista Joan Mesquida, ex director general de la Guardia Civil y de la policía, encabezarán, si nada se tuerce, la lista autonómica de Ciudadanos para presidir la Junta castellanoleonesa y la candidatura balear al Congreso.

Albert Rivera se lo juega todo en las elecciones generales del 28 de abril. No tiene en mente otra idea que no sea desbancar a Pablo Casado como líder del centroderecha y entrar en la Moncloa. Pero los informes de los expertos en prospección electoral de su partido, los mismos que demostraron con datos a la dirección de Ciudadanos que entre sus votantes es mayor el rechazo a Pedro Sánchez que el que suscita Vox, constatan que sus expectativas van a la baja. Los liberales tienen una sangría de votos hacia el partido de extrema derecha.

Esa delicada situación es la que está detrás del giro conservador del partido de Rivera para taponar la hemorragia. También está detrás del desembarco de Inés Arrimadas en el Congreso como número uno de los liberales por Barcelona. Este lunes se anunciaron dos más, los fichajes de la expresidenta de las Cortes de Castilla y León y del exresponsable máximo de la Guardia Civil y de la Policía durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Cierto es que ambos estaban ya fuera del PP y del PSOE, pero no dejan de ser ex altos cargos públicos de esos partidos.

Clemente, si gana las primarias de Ciudadanos en Castilla y León, optará el 26 de mayo a presidir el Gobierno autonómico. Mesquida, también si se impone en las votaciones internas, será el cabeza de lista del partido naranja por Mallorca para las generales del 28 de abril. La expresidenta de las Cortes castellanoleonesas protagonizó una explosiva salida del PP el pasado jueves. Dijo que se iba porque con Pablo Casado como líder nacional el proyecto «carece de ambición y no tiene contenido ni iniciativas», mientras que Alfonso Fernández Mañueco, el presidente de los populares en Castilla y León, «no tiene palabra ni capacidad y carece completamente de liderazgo». En realidad, dice en el PP, se marchó un minuto antes de que la echaran.

El vicesecretario de organización, Javier Maroto, tras mostrarse «sorprendido» de que Ciudadanos cobije a Clemente, recurrió a informaciones «de medios de comunicación» para poner «en duda» la «honestidad» de la hasta hace cinco días su compañera. Se escabulló como pudo al ser preguntado si el PP conocía esa situación de la presidenta de las Cortes de Castilla y León mientras militaba en su partido, y si era así por qué no tomaron medidas.

Mientras en el PP todo eran malas palabras contra Clemente, en Ciudadanos casi todo eran parabienes. Rivera señaló que el fichaje evidencia «la transversalidad» de su partido al incorporar a «independientes». Y Arrimadas subrayó que la incorporación demuestra que «saben atraer talento también de gestión». 

Regeneración

Clemente ha recorrido casi todo el escalafón en la Administración autonómica y antes de presidir las Cortes fue consejera en tres carteras. Aunque también hubo quien torció el gesto al conocer la noticia, como Francisco Igea, diputado de Ciudadanos y portavoz de Sanidad en el Congreso, que se presentará a las primarias para impedir que Clemente sea la candidata de su partido en Castilla y León. El fichaje es «un error», argumentó Igea, porque alguien que ha estado casi dos décadas en los gobiernos del PP no puede representar la regeneración.

Menos polémica, por no decir nada, ha resultado la incorporación de Mesquida. En el PSOE no produjo ni frío ni calor porque abandonó el partido en marzo del 2018 en desacuerdo con la postura ante el proceso soberanista de Cataluña, y aunque ha ocupado cargos de responsabilidad, también fue secretario de Estado de Turismo con Zapatero y consejero de Hacienda en el Gobierno balear de Francesc Antich, nunca tuvo peso político en el PSOE.