Sánchez rentabiliza su paso por la Moncloa y es el líder mejor valorado

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Casado y Rivera pagan el coste del giro a la derecha que representa su alianza con Vox

23 feb 2019 . Actualizado a las 18:07 h.

Casi nueve meses después de convertirse en el primer presidente del Gobierno de la democracia que accede al cargo por medio de una moción de censura y sin que su partido ganara las elecciones, Pedro Sánchez parece haber rentabilizado su paso de la Moncloa hasta convertirse en el líder mejor valorado a ojos de los españoles. En un marco en el que todos los dirigentes de los principales partidos suspenden, es el único que se acerca a un aprobado raspado, con una nota de 4,63 en una escala de 0 a 10. Según la encuesta elaborada por Sondaxe para La Voz, cuyo trabajo de campo se realizó entre el 13 y el 21 de febrero del 2019, Sánchez no ha sufrido desgaste en una legislatura atípica, la más breve de la democracia, y en la que no ha logrado sacar adelante los Presupuestos pese a haber tratado de aprobarlos con los partidos independentistas. Y tampoco le pasan factura los escándalos que obligaron a dimitir a dos de sus ministros, Màxim Huerta y Carmen Montón, ni la escasa producción legislativa de su mandato.

En el lado contrario, los líderes del PP, Pablo Casado, y de Ciudadanos, Albert Rivera, no parecen haber rentabilizado su estrategia de máxima erosión al presidente del Gobierno con una oposición muy dura centrada en las críticas a un jefe del Ejecutivo que accedió al cargo gracias a los partidos independentistas y al que han acusado reiteradamente de hacer concesiones a los secesionistas para tratar de ganarse su apoyo y mantenerse en el poder. El relevo en la dirección del PP tras la salida de Mariano Rajoy del Gobierno no se ha traducido en lo que en un principio de llamó el efecto Casado. El nuevo líder de los populares se queda a ojos de los españoles con una pobre valoración de 3,40, obteniendo así unas cifras similares o incluso peores de las que alcanzaba Rajoy en los sondeos previos a su destitución como jefe del Ejecutivo.

El giro de Casado y Rivera

El escaso apoyo que obtiene la figura de Casado entre los españoles parece cuestionar el cambio de rumbo que ha imprimido al PP, abandonando el perfil más moderado y centrista que sostenía el anterior presidente del Gobierno para sustituirlo por un planteamiento más radical en lo que afecta a la situación en Cataluña, en donde Casado se muestra partidario de aplicar el artículo 155 de una manera más amplia y prolongada en el tiempo de lo que lo hizo su antecesor en el partido. Y tampoco ayuda a remontar su valoración el haber asumido parte de las propuestas de un partido de extrema derecha como Vox en cuestiones como la inmigración e incluso el aborto, ni el pacto alcanzado en Andalucía con el partido de Santiago Abascal para desalojar del Gobierno a los socialistas.

Pero si Casado no logra hacer crecer la valoración del liderazgo en el PP, tampoco parecen apreciar los españoles la labor que ha llevado a cabo durante esta legislatura el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. El líder naranja, que acostumbraba a aparecer como el mejor valorado en los sondeos al sumar simpatías de votantes de derecha y también de la izquierda más moderada, se queda ahora en un 3,63, por delante de Casado, pero muy por detrás de Pedro Sánchez, que le saca un punto de ventaja. La causa de ese descenso cabría aplicarla en este caso al giro a la derecha que ha emprendido el partido naranja y al coste del pacto tripartito con Vox en Andalucía para que el PP y Ciudadanos se hicieran con las riendas del Gobierno de la Junta.

La valoración de líderes refleja también el progresivo deterioro de la marca Podemos, cuyo líder, Pablo Iglesias, es el último entre los cuatro grandes partidos con representación parlamentaria, con un 3,30. Iglesias no rentabiliza la situación de vicepresidente del Gobierno de facto que él mismo ha parecido atribuirse en algunos momentos, ni el haber sido el principal sostén de Sánchez, que es quien sale fortalecido. Por debajo de Iglesias solo aparece ahora el líder de Vox, Santiago Abascal, que pese a la fuerte irrupción de su partido genera un gran rechazo en las fuerzas de izquierda y se queda por ello en una valoración de 2,99.

Votantes del PP dan a Abascal mejor nota que a Casado y los de Podemos, a Sánchez que a Pablo Iglesias

La encuesta realizada por Sondaxe sobre la valoración de líderes políticos arroja algunos datos sorprendentes y significativos, que parecen explicar el cambio de escenario que se ha producido en el tablero político, y muy especialmente en la derecha, con la irrupción de una fuerza como Vox. Entre ellos destaca el hecho de que los que fueron votantes del PP en el 2016 valoran mejor al líder del partido de extrema derecha, Santiago Abascal, que al propio jefe de filas del PP, Pablo Casado. Entre quienes declaran haber dado su apoyo al PP en las últimas elecciones, Casado obtiene una nota de 6,2, mientras que Abascal recibe a ojos de los que metieron en 2016 la papeleta de los populares en la urna una calificación de 6,3. El dato parece confirmar por una parte del descontento de los electores conservadores con la política llevada a cabo por Mariano Rajoy, y también que el grueso de los que están dispuestos a votar ahora a Vox proceden del PP y prefieren el original de la representación de la derecha más radical a la copia que podría implicar Casado al endurecer el discurso de su partido. El otro dato negativo para Casado es que el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, es mejor valorado por los ex votantes del PP, con un 5,3, que por los propios ex votantes del partido naranja, que otorgan a su presidente un 5,2.

El hundimiento de Iglesias

El socialista Pedro Sánchez es el líder que mejor calificación obtiene entre los exvotantes de su propio partido, alcanzando un 7,6 para los que apoyaron al PSOE en el 2016. Un dato que parece reafirmar el liderazgo del actual presidente del Gobierno en las bases socialistas frente a las críticas que ha recibido por algunos de sus propios compañeros de partido como la andaluza Susana Díaz y otros barones del PSOE, que cuestionaron sus negociaciones con los independentistas catalanes. Sorprende también que entre los antiguos votantes de Unidos Podemos Pedro Sánchez obtenga mejor calificación que Pablo Iglesias. El presidente del Gobierno es valorado con un 6,5, mientras que el líder del partido morado se queda entre los que le apoyaron en el 2016 en un 6,1. Un dato que se explica también por el fuerte desgaste interno que ha sufrido Iglesias en su propia formación por la batalla abierta con Íñigo Errejón y por la crisis de algunas de las confluencias, entre ellas la de los gallegos de En Marea.

El domingo, intención de voto y escaños

Sondaxe ha elaborado para La Voz un sondeo de cara a las elecciones del 28 de abril del que la valoración de líderes es solo la primera parte. Este periódico publicará el domingo el grueso de la encuesta, con la intención de voto y la correspondiente distribución de escaños, tanto en el conjunto de España como en Galicia y sus cuatro provincias.