El Parlamento Europeo cierra las puertas a Puigdemont

Cristina Porteiro
Cristina Porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

ESPAÑA

| AFP
NJO DE HAAN

La institución suspende su conferencia sobre el desafío secesionista y alega motivos de orden público

15 feb 2019 . Actualizado a las 16:54 h.

El Parlamento Europeo ha anunciado este viernes la decisión de su presidente, Antonio Tajani, de cancelar la conferencia «Catalunya y el juicio sobre el referendo: Un reto para la Unión Europea», que pretendían impartir en la sede de la Eurocámara el expresidente catalán, Carles Puigdemont, y el actual dirigente de la Generalitat, Quim Torra, el próximo lunes 18 para dar su visión sobre el juicio del desafío secesionista, en marcha desde el martes.

El italiano alega «motivos de orden público». Lo hace tras consultar a la dirección general de seguridad y constatar que existe «un alto riesgo de que el evento pueda ser una amenaza para el mantenimiento del orden publico». Esta decisión se basa además en los precedentes intimidatorios que han sufrido algunas de las sedes de las instituciones europeas ubicadas en Barcelona y asaltadas por activistas de ANC. «La valoración tiene en cuenta varios elementos, incluida la reciente ocupación por parte de manifestantes de los edificios del Parlamento Europeo y la Comisión Europea en Barcelona y las tensiones vinculadas al juicio contra los líderes independentistas catalanes, la falta de información de los participantes sobre el evento y, especialmente, la posibilidad de que haya incidentes dentro o alrededor del Parlamento», sostiene la institución en un comunicado. Todos esos riesgos hacen imposible las labores de seguridad de los equipos de la Eurocámara.

Con esta decisión la institución encuentra un resquicio para dar respuesta a la indignación de las delegaciones de eurodiputados españoles del PP, PSOE y Ciudadanos, quienes exigieron el jueves por carta al italiano que cerrase sus puertas al expresident, reclamado por la Justicia española. Los tres partidos cerraron filas en la misiva y acusaron a Puigdemont de ser un usurpador del cargo de presidente de la Generalitat y máximo responsable del golpe de Estado constitucional perpetrado el 1-O. Según sus portavoces, la Eurocámara no debería prestarse a los juegos de los secesionistas y servir de altavoz para desprestigiar la democracia de un país miembro.

Aunque el Parlamento Europeo ha recogido el guante, explica de forma escrupulosa que se debe a preocupaciones en torno a la seguridad, no entra a valorar criterios políticos, en línea con la posición de no intervención en un conflicto que, a ojos de la UE, sigue siendo asunto español.

La estrategia de internacionalización del desafío que han desplegado los secesionistas desde la celebración del referendo ilegal tiene como objetivo más cercano desacreditar a la Justicia española en Europa y poner en cuestión cualquier sentencia contraria a los 12 líderes independentistas que se sientan en el banquillo de los acusados. A pesar de las llamadas continuas de Bruselas a respetar la Constitución y el Estado de derecho, el movimiento abanderado por Puigdemont ha intentado desde su retiro en Waterloo enfangar los esfuerzos del Ejecutivo español por reducir la tensión en Cataluña. La conferencia del lunes, patrocinada por el eurodiputado ultra flamenco de la N-VA, Ralph Packet, y el exministro de Exteriores esloveno, Ivo Vajgl, seguía la misma lógica: Mantener vivo el conflicto.