El desenlace de una guerra interna que rompió a En Marea

Susana Luaña Louzao
Susana Luaña REDACCIÓN

ESPAÑA

Alexandra Fernández, en el Congreso
Alexandra Fernández, en el Congreso BENITO ORDOÑEZ

Solo Alexandra Fernández acudió a las reuniones del Consello das Mareas estas semanas para perfilar la estrategia del partido

13 feb 2019 . Actualizado a las 12:54 h.

La ruptura de la unidad de voto en el Congreso es el desenlace de una guerra interna que se vivió en los últimos días entre la dirección de En Marea y el grupo parlamentario en el Congreso, con la excepción de Alexandra Fernández, quien en las últimas semanas acudió a todas las reuniones del Consello das Mareas para perfilar la estrategia del partido en torno a los presupuestos estatales, una estrategia que cuatro de los cinco diputados en Madrid no tuvieron en cuenta.

El pasado lunes, mientras Yolanda Díaz y Ánxela Rodríguez presentaban en Madrid las 300 enmiendas que En Marea iba a negociar con el Gobierno socialista para que fuesen incluidas en los presupuestos y reconocían su intención de seguir negociando y llegar a un acuerdo, la coordinadora de En Marea se reunía en Santiago y emitía un duro comunicado en el que aseguraba que En Marea diría «non» a los presupuestos si el Gobierno no admitía las enmiendas antes del debate a la totalidad. Como el acuerdo no se alcanzó y además era imposible, con el PSOE más preocupado en convencer a los independentistas catalanes que en los votos de los diputados gallegos, esta misma mañana se reunió el consello das mareas para decidir, por mayoría, el voto negativo a las cuentas estatales «ao constatar a falta de vontade real de acadar un acordo por parte do Goberno».

Solo Alexandra Fernández lo tuvo en cuenta. Los demás diputados hicieron caso omiso de las directrices llegadas de la dirección del partido, lo que constata, una vez más, la ruptura interna de la formación, a la que ni EU ni Podemos ni la dirección de Anova reconocen ya como referente.