El PP acusa a Díaz de ser cómplice del pacto de Sánchez con los secesionistas

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo BAreño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

CARLOS MÁRQUEZ / EUROPA PRESS

Los populares tachan al Gobierno socialista de ser «el más sucio de la democracia»

29 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A pesar de haber gobernado España durante cinco legislaturas, dos de ellas, con mayoría absoluta, Andalucía ha sido siempre un baluarte inexpugnable para el PP. Solo o en compañía de otros, el PSOE lleva cuarenta años gobernando en ese territorio. El nuevo líder del PP, Pablo Casado, sabe por ello que su primera gran prueba serán las elecciones andaluzas del 2 de diciembre. Y también que quedar por debajo de Ciudadanos en esos comicios debilitaría enormemente sus opciones de cara a unas elecciones generales. Aunque no aspiran en ningún caso a ganar en Andalucía, el objetivo de los populares es en primer lugar superar al partido naranja. Y en segundo, forjar con Ciudadanos una alianza que supere en escaños a socialistas y Podemos. Un reto que se antoja complicado a la luz de los últimos sondeos. De ahí que el PP fuerce la máquina contra la candidata socialista, Susana Díaz, a medida que se acerca esa prueba.

En una tierra en la que el independentismo catalán genera un fuerte rechazo, la estrategia de los populares pasa por acusar a Díaz de ser corresponsable de la alianza de Sánchez con los secesionistas. Pero también, por acusar a Ciudadanos de haber actuado como sostén de la presidenta andaluza. En su discurso durante la reunión interparlamentaria del PP celebrada en Sevilla, el portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, aseguró que los andaluces «no van a perdonar» a Díaz su «silencio cómplice con los independentistas» que dieron el Gobierno a Sánchez. Tras los duros reproches de Casado al líder del PSOE por ser «partícipe y responsable» de un golpe, Cosidó acusó al Gobierno socialista de ser el «más sucio de la historia de la democracia».

El voto útil contra el PSOE

El secretario general de los populares, Teodoro García Egea, subrayó que el único candidato que puede acabar con la hegemonía del PSOE en el Gobierno andaluz es el popular Juan Manuel Moreno, porque, según dijo, «es el único que no votaría a favor de Susana Díaz». «No podríamos decir lo mismo del resto», insistió Egea, poniendo en duda el compromiso de Ciudadanos de no volver a apoyar a Díaz y también la resistencia de esta a gobernar en alianza con Podemos. La portavoz del PP en el Congreso, Dolors Monserrat, apeló también directamente al «voto útil» en Andalucía para el PP afirmando que el voto a Ciudadanos es «inútil». La exministra consideró igualmente a Díaz de «cómplice de los independentistas» por «no decir nada» ante sus pactos con Sánchez.

En la clausura de la interparlamentaria, Juan Manuel Moreno, al que Casado mantuvo como candidato a la Junta pese a apostar en las primarias por su rival, Soraya Sáenz de Santamaría, cargó duramente contra Susana Díaz, haciéndola también corresponsable de las políticas de Sánchez y de algunas de las últimas decisiones adoptadas por el PSOE en el Congreso. «Ha pasado de ser una leona a un corderito suavito, suavito», dijo sobre su supuesta enemistad con el líder del PSOE. «¿Por qué calla Susana cuando Sánchez da barra libre para que insulten a los símbolos de todos o a las religiones que profesamos? No nos gusta que insulten a la Virgen de La Macarena. ¿Por qué no se lo dice a Sánchez?», preguntó Moreno, aludiendo así al apoyo de los socialistas en el Congreso a la propuesta de Unidos Podemos de revisar el Código Penal para eliminar delitos como la ofensa a los sentimientos religiosos, las injurias a la Corona o el enaltecimiento del terrorismo.