Arrimadas responde a los secesionistas que rompe la convivencia quien excluye, no quien retira lazos

Cristian Reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

EFE | FERNANDO ALVARADO

La líder de Ciudadanos en Cataluña anima a retirar la simbología independentista de las calles

31 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Todo el mundo llama a la responsabilidad en Cataluña, pero casi nadie parece dispuesto a rebajar la escalada de tensión. El día después de la agresión que sufrió un cámara de Telemadrid en la concentración organizada por Ciudadanos para apoyar precisamente a la mujer que fue agredida el sábado pasado en Barcelona por retirar lazos amarillos, las críticas arreciaron desde todos los flancos contra el partido de Rivera. La formación naranja quiso capitalizar el descontento que hay en Cataluña con la guerra de lazos, llamando a la población a quitar simbología secesionista del espacio público, pero el cambio de rasante -escenificado por Albert Rivera e Inés Arrimadas en Alella, donde retiraron ellos mismos los plásticos- no le salió como esperaba y ayer se vio en el centro de la polémica. Lejos de pisar el freno, Ciudadanos insistió en que seguirá dando la batalla en la calle y seguirá explotando la tensión por los lazos amarillos. «Claro que hay que recuperar la convivencia, lo que no voy a aceptar es que se diga que quien quita un lazo es quien está rompiendo la convivencia, y no quien dice que más de media Cataluña no es Cataluña», afirmó Inés Arrimadas. «No pueden pedirme que me quede en casa», dijo. Ciudadanos acudió ayer al Defensor del Pueblo a pedir amparo por la situación de indefensión en que a su juicio se encuentran muchos catalanes ante la «intolerable» vulneración de su derechos.

Incluso el PP, que también alentó la retirada de lazos, se desmarcó de Ciudadanos. «El PP ha optado por la política de la responsabilidad y de no llevar la confrontación a la calle», señaló Pablo Casado. El PP catalán reprochó a la formación liberal que «no supiera controlar» la manifestación que organizó el miércoles. Casado, en cualquier caso, cargó con todo contra el secesionismo. «Es violento y siempre lo ha sido, van por la calle como matones pegando a la gente», añadió. El presidente popular reclamó además al Gobierno que «ponga orden» en Cataluña y garantice la seguridad. Desde el Ejecutivo replicaron que ya lo están haciendo.

En el independentismo también se lanzaron en tromba contra Ciudadanos, obviando que buena parte de lo que ocurre con la guerra de lazos lo ha fomentando el propio secesionismo, primero con la puesta en marcha del proceso de ruptura y ahora con la campaña de los lazos. Quim Torra evitó las declaraciones públicas, pero en un acto en Villafranca del Penedés, apareció ataviado con una gorra y un pañuelo amarillo, en apoyo de quienes colocan estos símbolos por toda Cataluña. La posición de la Generalitat la fijó su vicepresidente, Pere Aragonès, que acusó a Ciudadanos de buscar la tensión y la confrontación en la calle a cambio de un puñado de votos. El diputado Joan Tardà insinuó incluso que alguien tiene interés en que haya un «accidente» para dinamitar el proceso soberanista, mientras Eduard Pujol (JxCat), calificó a la formación naranja de «pirómana».

El agredido denuncia y se va

El cámara de Telemadrid que fue agredido durante la concentración convocada por Ciudadanos interpuso una denuncia por agresiones ante los Mossos. El reportero gráfico, que ha decidido dejar temporalmente la profesión y regresar a vivir a Alicante, fue agredido después de que un grupo de exaltados creyera que trabajaba en TV-3 por llevar una camiseta con un dibujo amarillo. El agredido también propinó un puñetazo a una de las personas que le estaban increpando. Ciudadanos, que había convocado la concentración, atribuyó el incidente a «infiltrados» radicales. Las principales asociaciones y colegios de periodistas de toda España condenaron la agresión a Vicent Albert porque supone «un ataque a la libertad de información».