Dos Porsches y 61 relojes, regalos al excomisario de Barajas

m. b. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

CHEMA MOYA

El exjefe policial del aeropuerto madrileño permitía el paso ilegal de ecuatoguineanos, según Anticorrupción

13 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El comisario de Policía Carlos Salamanca, exjefe del puesto fronterizo en el Aeropuerto de Madrid-Barajas durante nueve años (2006-2015), se encuentra en libertad provisional desde marzo tras pasar cuatro meses en prisión incondicional por su implicación en la operación Tándem. Salamanca fue detenido el 3 de noviembre junto al comisario jubilado José Manuel Villarejo, que sigue en la cárcel de forma preventiva, y otras cuatro personas en una causa que investiga delitos de blanqueo de capitales, organización criminal, cohecho y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

El juzgado de la Audiencia Nacional que instruye el procedimiento acordó en marzo abrir una pieza separada y levantar el secreto de las actuaciones solo para la parte que afecta a Salamanca. Este apartado detalla las dádivas y entregas en efectivo recibidas por este comisario cuando era jefe de Barajas a cambio de facilitar la entrada ilegal de personas ecuatoguineanas relacionadas, entre otras, con la compañía nacional del petróleo. Un informe de la Fiscalía Anticorrupción remitido al juzgado el 28 de febrero relata que la persona responsable de agasajar a Salamanca -jefe de la unidad contra las redes de inmigración ilegal cuando fue detenido- era el también investigado Francisco Menéndez Rubio. 

«Cortafuegos» en España

Se trata de un empresario que, según los fiscales, era el «cortafuegos» en España para enmascarar el origen del dinero procedente de sus socios ecuatoguineanos. Unos servicios por los que pudo haber recibido a través de la mercantil Frame Consultores y Asesores SL 17,1 millones de euros en el 2011 y 4,1 millones en el 2012 por servicios facturados «irreales».

En ese paquete también se gestionaba la intermediación del comisario de Barajas. La persona que puso en contacto a Menéndez y a Salamanca fue el empresario Fernando Luengo, que tenía negocios en Guinea Ecuatorial y que también venía aprovechándose del cargo que ostentaba el segundo «a cambio de dádivas de carácter suntuario».

Entre el 2012 y el 2015, Menéndez le dio dádivas de lujo, en dinero y en especie, para sí y sus familiares a cambio de permitir la entrada ilegal de responsables de Gepetrol y de la suegra del primero, Sara Blanca Donoso, así como para que les dispensara un «tratamiento vip», consistente en recogerlos a su llegada a Madrid por la escalerilla del avión y trasladarlos en vehículos oficiales hasta la salida para sustraerse de los controles. La lista incluyó el acceso a la propiedad y disfrute de dos Porsche, un Cayenne y un Panamera. Salamanca también recibió tres relojes de lujo valorados en 80.000 euros, un viaje a Londres en mayo del 2012 por 15.997 euros solo en traslados y alojamientos, la cesión del palco 2.043 del Bernabéu y entregas de unos 85.000 euros a partir del 2012.

En el registro judicial realizado en su vivienda fueron incautados, además, 61 relojes.