Urkullu replica a ETA que «nunca debió existir» e insiste en exigir que reconozca a todas las víctimas

JOSU GARCÍA VITORIA/COLPISA

ESPAÑA

EFE | David Aguilar

El lendakari insta a la banda terrorista a realizar en su final «una declaración clara, sobria y reparadora»

21 abr 2018 . Actualizado a las 23:22 h.

El lendakari volvió a referirse ayer al comunicado de ETA en el que la organización terrorista pedía perdón de forma selectiva, solo a aquellas personas que «no tuvieron participación directa en el conflicto». Como ya hiciera en la víspera, Iñigo Urkullu exigió a la banda que reconozca «a todas las víctimas» y le reprochó «el inmenso dolor causado», así como que «nunca debió existir» por «su historia de radical injusticia». El máximo responsable del Ejecutivo autonómico realizó estas declaraciones en Arcaute, en el transcurso de un acto de homenaje a la Unidad de Tráfico de la Ertzaintza, que ayer cumplió 35 años. «Muchas cosas -dijo el lendakari ante unas 200 personas- han cambiado desde que los primeros agentes salieron a nuestras carreteras en 1983. Algunas para bien, como la paz», se felicitó. «Porque -continuó- los vascos hemos vivido a la sombra de ETA y hay que agradecer a la sociedad y, en especial, a la Policía autonómica, su labor a favor de la convivencia y contra el terrorismo». En tono solemne, Urkullu apuntó que «se cierra una etapa con la disolución definitiva de ETA».

«Historia de radical injusticia»

Y advirtió de que la banda terrorista «nunca debió existir», porque lo suyo ha sido «una historia de radical injusticia». El lendakari añadió que «en el momento de su desaparición, espero que piensen en todas las víctimas que han provocado. Si piensan en todas las víctimas, su declaración debería ser clara, sobria y con intención reparadora, capaz de reconocer la injusticia del inmenso dolor que provocó».

Repulsa en los partidos

En el acto de Arcaute, Urkullu se refería al manifiesto de ETA por segunda vez en menos de 24 horas. En la víspera, mientras visitaba unas obras, ya había calificado de insuficiente el anuncio, pidiendo que la banda fuera más allá en su petición de perdón. También el Gobierno central y los partidos vascos habían mostrado su repulsa al texto hecho público. Mientras, las asociaciones de víctimas censuraban con dureza «la distinción» entre unos damnificados y otros. La izquierda aberzale, por su parte, aplaudió el comunicado de ETA, que durante casi 60 años causó más de 850 muertos. Arnaldo Otegi lo calificó de «histórico, sin precedentes en nuestra historia».