La despoblación y la dispersión influirán en la financiación autonómica

Francisco Balado Fontenla
fran balado MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Javier Cebollada / Efe

Rajoy avanza estas dos líneas maestras sobre las que se levantará el nuevo modelo y llama al PSOE a que se siente para la negociación

24 feb 2018 . Actualizado a las 22:08 h.

A pesar de que el pasado viernes el Gobierno admitía que la renovación del modelo de financiación autonómico es, de entre todos los grandes retos asumidos por Rajoy al inicio de la legislatura, el que se encuentra menos avanzado, parece que poco a poco se van estableciendo las grandes líneas maestras sobre las que se levantará.

Hace dos semanas, tras reunir a todos los barones del partido, Rajoy sofocó una pequeña crisis interna al dar su palabra de que no beneficiaría con una quita a las comunidades autónomas más endeudadas a través del Fondo de Liquidez Autonómica. Ayer, el propio jefe del Ejecutivo avanzaba desde Zaragoza que para la elaboración del mismo se tendrán en cuenta dos factores: la despoblación y la dispersión poblacional de cada territorio, dos elementos que resultan determinantes para que Galicia no salga perjudicada a la hora de fijar las reglas del juego.

Nueva llamada al PSOE

Aunque parezca una obviedad, cabe recordar que resulta mucho más caro prestar los mismos servicios a una población dispersa que a una concentrada. Precisamente en el arranque de la semana los presidentes autonómicos de Galicia, Asturias, Aragón y Castilla y León mantuvieron un encuentro para fijar una posición común respecto a futuras negociaciones en la materia a pesar de formar parte de partidos de distinto signo. Juntos, estos cuatro territorios suman 7,5 millones de habitantes, cifra superior a la de Cataluña. Rajoy hizo estas declaraciones durante su intervención en la convención nacional del PP sobre familia y conciliación, celebrada en Zaragoza. En su discurso, el presidente del Gobierno volvió a reiterar la necesidad de alcanzar un acuerdo con el PSOE, invitando a los socialistas a que pasen «del discurso a sentarse, hablar y buscar un entendimiento».

El presidente del Gobierno, que aterrizó en la capital aragonesa procedente de Bruselas, en donde participó en una cumbre con el resto de líderes europeos, afirmó que «la despoblación se está convirtiendo en un problema capital», garantizando que pasará a ser una de las prioridades del país y que su partido se encargará de ofrecer soluciones. Asimismo, defendió la promoción de un mundo rural «dinámico, moderno y con empleos de alto valor».