Empleados de la industria cárnica relataron en el programa de Évole las pésimas condiciones laborales en las que desarrollan su trabajo
14 feb 2018 . Actualizado a las 18:56 h.Agentes de la Policía Nacional y funcionarios de la inspección de Trabajo han acudido este miércoles a las instalaciones de uno de los mataderos denunciados por el programa Salvados, que dirige Jordi Évole, por la situación de maltrato a la que se ven sometidos los animales y cuyos trabajadores se quejaron de las pésimas condiciones laborales en las que deben desarrollar su trabajo. Se trata de Le Porc Gourmet, con sede en Santa Eugènia de Berga, a donde han acudido varias dotaciones del Cuerpo Nacional de Policía.
El propio Évole el se ha referido en su cuenta de Twitter a la intervención policial, que ha desarrollado la Policía Nacional debido a que la competencia de los permisos de extranjería corresponde al Ministerio de Interior, según informa El Periódico de Cataluña. Uno de los aspectos denunciados por los trabajadores fue precisamente la situación irregular de parte de la plantilla, formada por inmigrantes en situación irregular que perciben salarios muy precarios.
El registro en las instalaciones de Le Porc Gourmet se ha realizado a petición de la Inspección de Trabajo, según fuentes policiales citadas por el diario Público.
Comisiones Obreras también ha aprovechado la intervención para recordar las denuncias que desde hace tiempo dirige contra la industria cárnica por la vulneración de los derechos de los trabajadores. Miembros de la central acudieron al matadero a raíz de la inspección laboral para repartir información a los trabajadores sobre la vulneración de sus derechos.
Consecuencias de la emisión
A raíz de la emisión del reportaje Stranger Pigs en Salvados el pasado día 4, se han sucedido las reacciones, que han llevado incluso a Bélgica a retirar de dos cadenas de supermercado productos de la marca El Pozo, que, pese a acusar de «capciosas» las imágenes emitadas por el programa y desvincularse de su contenido, aseguró que ha abierto un expediente a una de las granjas que aparece en el programa, donde se muestran las pésimas condiciones en las que viven y mueren los animales.
A ello se ha sumado la decisión de la cadena de supermercados Edeka, una de las mayores de Alemania, de pedir explicaciones a El Pozo a raíz del reportaje de Évole. «Le hemos pedido a la empresa El Pozo que nos dé de inmediato una explicación y examinaremos de cerca los acontecimientos», señaló una portavoz de la compañía en un comunicado. «En caso de que se pruebe, vamos a tomar rápidamente las medidas oportunas», agregó.