Puigdemont rechaza la presión de ERC y se niega a ser presidente «simbólico»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Elsa Artadi asegura que Puidgemont es el único candidato
Elsa Artadi asegura que Puidgemont es el único candidato Celestino Arce Lavin | DPA

La ANC exige a los secesionistas que desobedezcan e invistan al fugado telemáticamente

12 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Carles Puigdemont no cede ante las presiones de ERC para que se convierta en un presidente «simbólico» y permita que Cataluña tenga un Gobierno viable. El expresidente de la Generalitat, huido de la Justicia en Bélgica, está dispuesto a llegar hasta el final en su órdago para ser investido telemáticamente y con plenos poderes, aunque eso implique que todos los miembros de la Mesa del Parlamento catalán que admitan una votación de ese tipo, vulnerando la prohibición expresa del Tribunal Constitucional, acaben imputados por delitos de desobediencia y prevaricación.

La portavoz de Junts per Catalunya, Elsa Artadi, cuyo nombre es precisamente el que más suena como sustituta de Puigdemont, se encargó ayer de responder a las exigencias de ERC. «No consideramos en ningún caso que el presidente Puigdemont deba ser un presidente simbólico», señaló en una entrevista, en la que, pese a las expectativas generadas en los últimos días, insistió en que Puigdemont es el único candidato de JxCat para ser un presidente «que debe mandar». Aseguró que cuenta con apoyo de la mayoría absoluta de los diputados, por lo que no se entiende «que se esté hablando de planes B».

Pero, por encima del apoyo de su propio partido, Puigdemont recibió el respaldo de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) a su estrategia de ruptura y desobediencia. El secretariado nacional de la ANC, emitió un comunicado en el que se afirma que se ha entrado «en una fase decisiva del camino que nos tiene que llevar a la independencia efectiva de Cataluña». «Ahora hay que demostrar que unos y otros estamos dispuestos a asumir las responsabilidades y consecuencias penales ante el Estado demofóbico que tenemos abiertamente en contra», afirma la plataforma independentista, en abierta contradicción con su ex presidente y ahora diputado Jordi Sánchez, encarcelado bajo la acusación de rebelión y que en un escrito dirigido al juez del Supremo Pablo Llarena para pedir su excarcelación renegó de la vía unilateral. Sánchez, que renunció a la presidencia de la plataforma para ir en las listas de JxCat, no ocupa ahora ningún cargo en ella.

La ANC reclama ahora, sin embargo, a los políticos que asuman «los riesgos que comporte» el liderazgo independentista. «Preparamos movilizaciones para apoyar acciones valientes o para exigirlas», señala la plataforma, que eleva además la presión sobre ERC advirtiendo de que «en caso de que no haya acuerdo para la investidura, llamamos a movilizarnos inmediatamente para exigir la investidura del presidente que hemos votado y a favor de la república». Sostiene también que los pronunciamientos de los «desacreditados tribunales españoles» no tienen que tener «efectos sobre el territorio de Cataluña desde la declaración de independencia del 27 de octubre de 2017».

Artadi enfría su candidatura

El espaldarazo de la ANC a Puigdemont complica todavía más la posibilidad de que se llegue a un acuerdo que permita desbloquear la situación en Cataluña, toda vez que en ERC no están dispuestos a emprender de nuevo la vía de la desobediencia que, a su juicio, solo serviría para prolongar la aplicación del artículo 155 de la Constitución. La propia Artadi trató de enfriar las expectativas de que ella misma acabe siendo la candidata a la Generalitat como solución de consenso una vez que Puigdemont aceptara el papel de presidente simbólico en el exilio. Según explicó, JxCat ha pedido modificar la ley de presidencia para «poner por escrito y de manera explícita lo que ni el reglamento ni la ley prohíban», aunque, a su juicio, a Puigdemont ya se le podía investir a distancia sin necesidad de modificar esta ley.