La agenda negra de Josep María Jové, el diario del proceso secesionista

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Josep María Jové
Josep María Jové JON NAZCA | Reuters

La decisión de ampliar la investigación de la causa secesionista está relacionada con la incautación de una agenda de uno de los grandes arquitectos en la sombra de todo el proceso independentista

12 dic 2017 . Actualizado a las 12:35 h.

La decisión del juez del Supremo Pablo Llarena de ampliar el marco de la investigación de la causa secesionista está directamente relacionada con la incautación en uno de los registros de una agenda a Josep María Jové, hombre de confianza de Oriol Junqueras, ex secretario general del departamento de Vicepresidencia, Economía y Hacienda de la Generalitat y uno de los grandes arquitectos en la sombra de todo el proceso independentista. Los agentes de la Guardia Civil que el pasado 20 de septiembre registraron la vivienda de Jové en Les Franqueses del Vallès (Barcelona) hallaron una agenda grande de color negro, de la marca Moleskine, con anotacionesque recogen de forma detallada la gran mayoría de los episodios por los que ha atravesado el desafío secesionista desde el 12 de febrero del 2015. Se divide en cuatro grandes fases: «preparación del Estado, reconocimiento del Estado a nivel internacional, estructuras de Estado y medidas sectoriales», que abarcan desde antes de la formación de Junts pel Sí, la lista en la que concurrieron Convergència y ERC a las elecciones de ese año, hasta las medidas para implantar con éxito la independencia en un tiempo establecido de 18 meses.

En las anotaciones investigadas por la Guardia Civil se aprecian las estrategias de la formación republicana para alcanzar el objetivo de la autodeterminación, como ceder la presidencia a sus socios de gobierno a cambio de controlar otras áreas más determinantes para el futuro, la necesidad de contar con la CUP o la importancia de explorar alianzas con la formación satélite de Podemos en Cataluña. 

En el verano del 2016 concluyen que la negociación con el Gobierno central jamás llegaría a buen puerto, por lo que se decide abrazar el camino de la unilateralidad, una vía antidemocrática que tratarán de maquillar hasta «revestirla de legalidad». Según los investigadores, «en la práctica el calendario se respetó casi en su totalidad».

Anna Gabriel, pedía que la policía pudiera avisar a algún cargo político si iban a ser detenidos

En varias de las anotaciones de la agenda se recogen reflexiones sobre la actitud que podrían adoptar los Mossos en determinados momentos conflictivos y la importancia de las plataformas cívicas a la hora de presionar en las calles. También tienen un gran valor todos los nombres que aparecen recogidos en sus páginas (Puigdemont, Rovira, Romeva...), así como el papel de cada uno de ellos, entre los que destaca especialmente el del exvicepresidente del Tribunal Constitucional Carles Viver. Estas son algunas de las fechas clave de la agenda de Jové:

  • El 21 de diciembre del 2015, pocos días antes de la investidura de Puigdemont, Jové detalla una reunión en la que se empezó a perfilar la hoja de ruta, con la presencia de Marta Rovira, el secretario de Economia Pere Aragonés, el conseller Raul Romeva, la secretaria de Salud Alba Vergés, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tarda, el secretario de Finanzas Jordi Roig y el jurista Viver Pi i Sunyer.
  • En febrero del 2016 en las anotaciones de Jové se consideraba que un referendo no pactado y unilateral «no tenía sentido», aunque se pensaba internamente que la única manera de que internacionalmente se presionase al Estado era «ir hasta el final». «Anotaron expresamente que ello», dice la Guardia Civil sobre un referéndum sin pacto previo, «podría suponer hacer el ridículo».
  • 17 marzo del 2016 «Reuniones de Hacienda» entre Junts pel Si y la CUP. Entre los objetivos está pasar de 325 a 850 empleados en la Agencia Tributaria Catalana; desplegar un código tributaria para la transición e instalar un software para recaudación de impuestos para crear una Hacienda del estado catalán.
  • Mayo del 2016: «Presupuestos de ruptura con España». Con cinco líneas: reducir más de 270 millones en gastos simbólicos; aumentar la recaudación con nuevos impuestos; confrontación con el Estado; impago de la deuda con el Estado; y construcción de la república.
  • Junio 2016. Tienen lugar varias reuniones entre miembros del Govern y dirigentes de ERC con representantes de CDC -en la coalición de JxS- y la CUP para avanzar en la creación de las denominadas Estructuras de Estado y para abordar el referendo independentista. En sus anotaciones, Jové subraya que el objetivo del Govern salido del 27S tenía que ser doble, por un lado la «Transición Nacional» y por otro gestionar el gobierno ordinario, haciendo efectiva «la desconexión, la ruptura y la desobediencia» en 18 meses.
  • El 30 de junio del 2016 surgen las principales dudas de cara a celebrar el referendo: procedimiento y tramitación a seguir, la doble legalidad temporal que existirá, elementos objetivos como la Intervención General, Local y los Mossos; y las posibles reacciones del Estado central.
  • 8 de noviembre del 2016. «Reunión War room» (habitación de guerra) en la que Puigdemont aseguró que los Mossos «harán siempre lo que les digan los jueces. No habrá ninguna orden del Departamento del Interior». Por su parte, Anna Gabriel, pedía que la policía pudiera avisar a algún cargo político si iban a ser detenidos para estar informados. «Así nos podríamos coordinar».
  • Noviembre del 2017: «El referendo no lo controlamos y ahora ya saben como cargárselo porque hicimos el 9-N. No lo podemos hacer. Valoramos si tenemos que escenificarlo. Cómo contratamos las empresas que han de hacer el seguimiento y el recuento. Censo no lo podemos utilizar. Policía, a quién obedecerá. Gente que participará en las mesas. Cómo abriremos los colegios electorales. Eso se supera cambiando y aceptando una nueva legalidad. Igual para las elecciones constituyente que tampoco podemos hacer serían autonómicas. 'Trampa'».
  • «Dado que consideran que la situación es de no retorno, es fundamental que ERC controle áreas clave vinculadas al proceso, aún a costa de ceder la presidencia a CDC», dice otra anotación.
  • Y, según las notas manuscritas, era clave crear una gran plataforma de debate ciudadano, utilizando para ello a las plataformas soberanistas Òmnium Cultural y Assemblea Nacional Catalana (ANC), intentando cerrar la estrategia con la CUP y teniendo puentes para que el partido de Ada Colau participara en el proceso constituyente.