El giro de Forcadell arrastra a los exconsejeros y aísla a Puigdemont

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

ATLAS TV

Los encarcelados por la Audiencia Nacional se plantean acatar el 155 para salir de prisión

11 nov 2017 . Actualizado a las 11:01 h.

La decisión de la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, de acatar la aplicación del artículo 155 de la Constitución, renunciar a la vía de la independencia unilateral y comprometerse a no volver a actuar al margen de la Carta Magna para evitar así la prisión, ha supuesto un cambio de estrategia de los exconsejeros encarcelados, que se plantean emprender la misma vía para salir de la cárcel. Una vía, la del acatamiento constitucional y la renuncia a la imposición unilateral de la secesión, que dejaría aislado políticamente al expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que desde Bruselas insiste en presentarse como presidente legítimo de la república.

Tras prescindir del abogado Alonso-Cuevillas, que defiende también a Puigdemont, los cuatro exconsejeros de la Generalitat pertenecientes al PDECat han nombrado otro letrado y se plantean reclamar una nueva comparecencia voluntaria ante la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela para declarar en los mismos términos que Forcadell para poder salir de la cárcel. En su anterior comparecencia, tanto el exvicepresidente Oriol Junqueras como los otros siete ex consejeros encarcelados se negaron a contestar las preguntas de la Fiscalía y solo respondieron a preguntas planteadas por sus abogados.

La decisión del Ministerio Público de no recurrir la puesta en libertad bajo fianza de Forcadell y de los miembros de la Mesa del Parlamento catalán alimenta la expectativa de que la Fiscalía reconsideraría también en la Audiencia Nacional su petición de prisión para los exconsejeros encarcelados si estos asumen los mismos compromisos que Forcadell. Y también el hecho de que el juez Llarena advierta de que la presidenta del Parlamento catalán volvería a la cárcel si una vez en libertad se demuestra que el acatamiento de la Constitución es solo instrumental ayuda a que la Fiscalía acepte el mismo criterio. La otra vía que se plantean los exconsejeros encarcelados es aguardar a que el Supremo asuma también su causa y dar ese giro en su estrategia de defensa ante el juez Llarena, con lo que, de actuar igual que Forcadell, tendrían casi garantizada la salida de prisión.

El Gobierno, optimista

A la espera de acontecimientos, el Gobierno saludó ayer con optimismo el hecho de que los investigados en el Tribunal Supremo acataran la aplicación del artículo 155 de la Constitución y se comprometieran a no volver a actuar al margen de la ley. Algo que, en palabras del portavoz del Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo, supone que «la vuelta al orden constitucional empieza a ser una realidad» y que la situación de «inseguridad» creada por el secesionismo en Cataluña puede acabar después de las elecciones del 21 de diciembre.

Forcadell abandonó ayer la prisión de Alcalá Meco tras abonar los 150.000 euros de fianza que le impuso el juez con un cheque de la Caja de Ingenieros, una de las dos únicas entidades financieras que permanecen en Cataluña, abonado por la Asamblea Nacional Catalana.

La presidenta de la Cámara pide que el Supremo asuma la causa de la Audiencia Nacional

La defensa de Carme Forcadell y de la miembro de la Mesa del Parlamento catalán Anna Simó solicitó al Tribunal Supremo que asuma y que acumule la causa por rebelión y sedición contra el anterior Gobierno catalán que se sigue en la Audiencia Nacional.

El letrado Andreu van den Eynde sostiene que «el objeto de ambos procesos es coincidente o, en cualquier caso, conexo» y que la imputación describe delitos «que por su estructura típica de comisión basada en actuaciones grupales y reparto de cometidos, solo puede ser abordada desde un único proceso».

«Conciencia tranquila»

Después de abandonar pasadas las dos de la tarde la prisión de Alcalá Meco, en la que pasó la noche, Forcadell aseguró en la red social Twitter que regresa a casa con la «conciencia tranquila» porque cree haber actuado «correctamente» al «garantizar la libertad de expresión» en la Cámara catalana. La presidenta del Parlamento autonómico se dirigió también a los exconsejeros del Gobierno catalán y a los líderes de la Asamblea Nacional de Cataluña y de Òmnium, que están en la cárcel acusados de los mismos delitos. «No os olvidamos, os queremos libres, os queremos en casa, os queremos con vuestras familias, estamos con vosotros», escribió.