Comienza en Cuenca el juicio contra Sergio Morate por el asesinato de dos chicas en el 2015

Agencias CUENCA

ESPAÑA

Atlas

El jurado popular rechaza aislarse y celebrar el juicio a puerta cerrada, como pedía la defensa de Sergio Morate

23 oct 2017 . Actualizado a las 12:24 h.

El juicio con jurado contra Sergio Morate, acusado de los asesinatos de Marina Okarinska y Laura del Hoyo en agosto del 2015, se ha iniciado con tensión entre familiares y amigos a su llegada a las puertas de la Audiencia Provincial de Cuenca.

Sergio Morate
Sergio Morate José del Olmo | Efe

Varias amigas y familiares, fundamentalmente de Laura del Hoyo, han increpado al procesado con gritos de «criminal» y «asesino» e intentos de acercarse a él que han sido impedidos por los numerosos agentes de la Policía Nacional que se han desplegado para evitar incidentes. Momentos antes, en las vallas que se han instalado junto al edificio de la Audiencia, los allegados de las jóvenes asesinadas habían colocado pancartas en las que se podía leer «Que se haga justicia con el asesino que arrebató mi vida» o «Asesino, tú si que no mereces vivir».

Sergio Morate
Sergio Morate José del Olmo | Efe

Morate ha llegado en un furgón de la Guardia Civil desde la cárcel de Estremera (Madrid) en la que está internado y ha subido a la carrera las escaleras laterales por las que ha entrado en el edificio de la Audiencia Provincial escoltado por dos guardias civiles. Por la entrada principal han ido pasando las personas que asisten a la vista oral, entre especiales medidas de seguridad que se han puesto para acceder al edificio.

Ya en la sala, la defensa de Sergio Morate ha solicitado el aislamiento de los miembros del jurado popular que han de juzgar su culpabilidad, asegurando que ellos mismos han declarado sentirse influenciados por los medios de comunicación. En un escrito trasladado el pasado viernes a la Audiencia Provincial que ha sido leído por el presidente de la Audiencia, José Eduardo Mediavilla antes de dar inicio a la sesión, la defensa ha pedido la incomunicación del jurado ya que «su objetividad se encuentra contaminada» en el sentido de declarar culpable a Morate de los asesinatos de Marina Okarinska y Laura del Hoyo.

Pero el jurado ha rechazado la propuesta. Tras quince minutos de deliberación, el portavoz del jurado ha explicado que todos los miembros del jurado «son personas lógicas capaces de tomar la decisión basándose únicamente en las pruebas» que se expongan en el juicio, y no por «la información de redes sociales o medios de comunicación». «En cuanto a la propuesta de celebrar el acto a puerta cerrada, creemos en la no necesidad de que así sea, excepto cuanto se trate de temas delicados que puedan afectar a las víctimas», ha aseverado.

El presidente de la Audiencia Provincial, José Eduardo Martínez Mediavilla, ha decretado un receso de unos 30 minutos para tomar la decisión, toda vez que el jurado ha sido escuchado. En caso de no aceptarse este aislamiento, propone el abogado defensor celebrar todas las sesiones a puerta cerrada, sin público y sin prensa.

El ministerio fiscal rechaza las teorías

La fiscal ha rechazado los argumentos de la defensa, explicando que las excepciones que la ley recoge a la hora de garantizar la publicidad, no ha habido ninguna razón de orden público que motive la celebración del juicio a puerta cerrada.

Excluidas las razones de seguridad, entiende la representante del Ministerio Fiscal en cuanto a los medios de comunicación que «puede ser más o menos cómoda su presencia», pero ha de primar el derecho a la publicidad, «derecho de toda la sociedad y del acusado». «El Tribunal Constitucional nos dice que la publicidad es proteger a las partes y mantener la confianza de la comunidad en los tribunales», ha señalado.

Sobre el aislamiento del jurado, ha asegurado que en todo caso todos sus miembros han jurado o prometido basarse únicamente en las pruebas que se relaten en el juicio para determinar la culpabilidad de Sergio Morate.

«El único momento en el que la ley determina que el jurado debe de estar incomunicado es en el momento de la deliberación, que tendrá lugar a puerta cerrada y sin comunicación hasta que se decida el veredicto», ha recordado.

«Es una estrategia»

La abogada de la familia de Marina Okarinska ha entendido que esta petición es una «estrategia de defensa», asegurando que el jurado ya ha prometido dictaminar «con imparcialidad, examinando todas las pruebas». «Esta parte no tiene ninguna duda».

De su lado, el abogado de la familia de Laura del Hoyo, sí se ha reservado la opción de pedir para algún momento determinado la celebración a puerta cerrada. «Entendemos que sería el jurado el que tendría que solicitar su incomunicación por considerarse presionados», ha añadido.

El abogado en representación de la Junta de Comunidades -personada en la causa al tratarse de un delito de violencia de género- ha defendido que los medios de comunicación sólo «van a reproducir» lo que ocurra en el juicio, si bien el jurado «se dejará llevar por lo que pase» en las sesiones.