El juez acordará medidas urgentes para que los hijos de Rivas vuelvan con su padre

El Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada, el órgano especializado en derecho de familia que ordenó a Juana Rivas devolver a su padre, Francesco Arcuri, a sus dos hijos de 3 y 11 años, acordará el lunes medidas extraordinarias y urgentes para la protección de los menores que garanticen la ejecución de la sentencia, que ordena que los niños vuelvan a Italia con su progenitor, al domicilio familiar, de donde su madre se los llevó hace más de un año. El juzgado, después de que Rivas huyese el pasado 26 de julio para no entregar ese día a los niños a su padre, y a instancias de Arcuri, citó a ambos progenitores el 21 de agosto a una comparecencia judicial para debatir las medidas solicitadas por el italiano.

Juana Rivas y Francesco Arcuri están citados el lunes en un juzgado granadino Si Rivas, que se encuentra en paradero desconocido con sus dos hijos desde hace 23 días, no acude a la cita del lunes, el juez, entre las medidas urgentes, podría solicitar el auxilio de la Policía Nacional y la Guardia Civil para que localicen a los niños y se los entreguen a su padre lo antes posible. Esta previsión figura ya de manera explícita en la sentencia, de 14 de diciembre del 2016, que ordenó la «inmediata restitución» de los niños a Arcuri y a su residencia de Italia. En caso de incumplimiento, indica, «se acordará por este juzgado las medidas coercitivas que sean necesarias, incluido el auxilio de las fuerzas de seguridad, para el traslado efectivo y seguro de los niños» al país vecino.

De hecho, es justo la decisión que el pasado 10 de agosto le recomendó al juzgado la Audiencia Provincial de Granada en el auto con que rechazó la pretensión de Rivas de que paralizase la ejecución de la sentencia y en el que reiteró la urgencia de que los niños sean entregados al padre. No ven, aseguraron los magistrados, más salida ante «la conocida actitud desafiante» de Rivas «a los requerimientos judiciales», que consideran «retiene, no se sabe en qué condiciones, a sus hijos, evitando la entrega de los mismos». Es más, la audiencia provincial ordenó que se devolviesen «sin demora» los autos del caso al juzgado civil para que pudiese tomar de «inmediato» medidas que garantizasen la ejecución de la sentencia.

El juzgado de primera instancia no aceptó el 26 de julio la petición de Arcuri de que dictase contra Rivas una orden de detención internacional, para evitar el riesgo en que creía que había colocado a sus hijos. Lo que sí hizo fue deducir testimonio de su huida y lo remitió a la jurisdicción penal.

Sin pistas de su paradero

A raíz de estos documentos, el Juzgado de Instrucción número 2 de Granada abrió diligencias penales por sustracción de menores y delito de desobediencia contra Rivas y, ante la incomparecencia de la investigada, ordenó el 8 de agosto su detención con la doble intención de que no eluda la acción de la justicia y que los menores sean entregados a su padre.

El padre de Rivas anima a su hija a que no se entregue a las fuerzas de seguridad Días después de la orden de arresto, no se hay noticia alguna sobre el paradero de Rivas y de sus hijos. El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, negó ayer que las fuerzas de seguridad hayan descuidado la orden de arresto y dijo que hacen todo lo que pueden por cumplirla. El padre de Rivas, Manuel Rivas, la animaba ayer en televisión a no entregarse. Aseguró que Arcuri es un «maltratador», aunque diga lo contrario, y que «nada más quiere hacerle daño a ella, incluso arrebatándole a los niños». Los abogados de la madre anunciaron que presentarán un nuevo recurso contra la sentencia que le obliga a entregar a los niños, esta vez ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

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