Iglesias eleva la presión para apartar al líder de Podemos en Cataluña

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo BAreño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

MARTA PÉREZ

La dirección nacional quiere forzar a Fachin a poner en juego su cargo en una asamblea por su apoyo al referendo

04 ago 2017 . Actualizado a las 07:16 h.

El referendo de independencia en Cataluña ha fracturado a Podemos hasta el punto de crear la paradójica situación de que el secretario general del partido, Pablo Iglesias, trate de forzar la destitución su líder en esa comunidad, Albano Dante Fachin, para que el partido se someta a las tesis de otra fuerza política: los comunes de Ada Colau. La ruptura entre Iglesias y Fachin es ya irrecuperable. La negativa del líder catalán a asumir la llamada de Iglesias a no participar en un referendo unilateral y a confluir con Catalunya en Comú ha movilizado la maquinaria del aparato del partido morado para apartar a Fachin. Pero Iglesias no lo tiene fácil, porque la decisión de participar en el referendo ilegal ya fue respaldada mayoritariamente por las bases del partido en Cataluña y Fachin está dispuesto, además, a realizar otra consulta a primeros de septiembre. 

Asamblea frente a consulta

Ante ello, la estrategia de la cúpula de Podemos es cercar a Fachin para obligarlo a convocar cuanto antes una asamblea en la que se debatan de nuevo y en profundidad ambas cuestiones: la consulta independentista y la relación con Catalunya en Comú. «Todo lo que afecta de forma directa a nuestra militancia y a nuestra razón de ser, a la naturaleza de Podemos en cada lugar y todo lo que sea una decisión estratégica se tiene que tomar en abierto y debatir y discutir con las bases», sostuvo ayer la portavoz de la ejecutiva nacional del partido, Noelia Vera, sumándose a la presión ejercida en los últimos días por Iglesias y por el secretario de Organización, Pablo Echenique. «Nosotros acabamos de pasar por una asamblea nacional para definirnos y marcar las estrategias. Eso se tiene que replicar cuando estamos hablando de algo tan importante como el encaje de Cataluña en España», insistió.

Iglesias y sus fieles sostienen que la dirección del partido en Cataluña no representa en este momento la pluralidad de voces a favor o en contra del referendo que hay en los círculos de Podemos en esa comunidad, y que por eso debe ser modificada. Al contrario de lo que ocurriría con una simple consulta, la celebración de una asamblea obligaría a renovar los cargos en Cataluña y permitiría a Pablo Iglesias forzar a la militancia a confrontar su propio liderazgo con el de Fachin para apartarlo del cargo, al estilo de lo que ocurrió con Íñigo Errejón en la asamblea nacional del partido. Pero Fachin no está dispuesto a poner en juego su cargo. El líder del partido en Cataluña ya advirtió de que «no le corresponde ni a Iglesias ni a Echenique cambiar a la dirección». «Lo que sucede en Cataluña se decide en Cataluña», señaló.

No es esta la primera vez que Iglesias pretende forzar la destitución de uno de los líderes regionales de Podemos por no aceptar sus consignas. Ya lo hizo en Galicia con Breogán Rioboo y también en el País Vasco con Roberto Uriarte, que dimitió denunciando presiones del aparato.