La histórica exetarra La Tigresa saldrá de prisión el próximo 13 de junio tras cumplir la totalidad de sus condenas

Europa Press

ESPAÑA

Paco Campos | EFE

Arrepentida y expulsada de la banda, integró el «comando Madrid» uno de los mas sangrientos. Idoia López Riaño no ha disfrutado ninguno de los ocho permisos penitenciarios que le han otorgado y tendría pánico a salir al exterior

19 may 2017 . Actualizado a las 19:57 h.

La histórica terrorista de ETA Idoia López Riaño alias La Tigresa saldrá de forma definitiva de prisión el próximo 13 de junio tras cumplir la totalidad de sus condenas, han confirmado fuentes jurídicas. Pese a haberle sido otorgados en los últimos meses unos ocho permisos penitenciarios, la exetarra no ha disfrutado ninguno de ellos y algunas fuentes apunta a que tiene, en realidad, pánico al exterior y «miedo escénico». Su salida en el 2015 para sacarse el carné de conducir cuando fue perseguida por la calle y fotografiada le habría provocado este miedo. 

López Riaño integró uno de los comandos más sangrientos de la historia de ETA, el comando Madrid de mediados de los ochenta en el que figuraban otros conocidos terroristas como De Juana Chaos, Soares Gamboa, Antonio Troitiño o Inés del Río.

Perpetraron algunos de los atentados más cruentos de la organización como el de la calle de Juan Bravo o el de la Plaza de la República Dominicana, que acabaron con la vida de cinco y doce guardias civiles, respectivamente. Además, en la cuenta particular de Idoia López Riaño también hay un empresario, un marinero, tres militares (entre ellos Ricardo Sáenz de Ynestrillas) y un policía.

También fue condenada por integrar posteriormente el denominado comando Ekaitz entre el año 1991 y 1992. A ese grupo, en el que también estaba Urrusolo Sistiaga, se le atribuyen acciones terroristas en Zaragoza, Tarragona, Barcelona, Alicante, Valencia y Murcia.

«Las muertes me duelen en el alma»

«Las muertes de este comando me duelen en lo más profundo del alma y aun más por no haber podido hacer nada por evitarlas. Yo tan solo tenía 20 años y aun así me jugué la vida en ese intento. Me costó siete años de mi vida en Argelia y que se me condenara a una pena terrible», confesó López Riaño en un texto remitido al Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, que justificó en este arrepentimiento sus permisos.

«Es absolutamente falso que no asuma mi conducta, no sólo mientras formé parte de ETA, sino igualmente cuando me enfrenté a esa terrible realidad, negándome a seguir por ese camino», decía en otro de sus escritos.

En el 2015 el juez central de Vigilancia Penitenciaria José Luis Castro le denegó este mismo permiso de salida alegando que La Tigresa -acogida desde hace años en la denominada Vía Nanclares- tan sólo reconocía dos de los 23 asesinatos por los que cumple condena. Además, los justificaba diciendo que sus víctimas eran un traficante de drogas y el otro, un miembro de los GAL.