Condena a un año de cárcel a una estudiante por humillar a Irene Villa o Miguel Ángel Blanco en Twitter

R. C. COLPISA

ESPAÑA

Twitter

Es la primera vez que el Supremo se pronuncia sobre la difusión de mensajes enaltecedores del terrorismo en redes sociales

13 jul 2016 . Actualizado a las 20:31 h.

El Tribunal Supremo se pronunció por primera vez sobre la difusión de mensajes enaltecedores del terrorismo en redes sociales como Twitter o Facebook y condenó a un año de cárcel a María Lluch Sancho por humillar a víctimas de ETA como Irene Villa o Miguel Angel Blanco, a través de su cuenta Madame Guillotine (@melodalger), en la que ha comentado este miércoles la resolución y las reacciones que ha provocado.

La Sala Segunda (de lo Penal) consideró que las expresiones emitidas en esta cuenta se enmarcan dentro del discurso del odio y no están protegidas por la libertad ideológica o de expresión. El tribunal subraya que no está penalizando el «chiste fácil o de mal gusto» ni se trata de «criminalizar las opiniones discrepantes», sino de combatir la actuaciones de aquellos que realizan un «grave quebranto en el régimen de libertades y daño en la paz de la comunidad» y «atentan» contra el sistema democrático establecido Según el fallo, una de las facetas de la humillación consiste en la burla y en los comentarios que escribió Madame Guillotine están recreados con un «bien concreto y referido a unas personas a quien se identifica con su nombre y apellidos». En este sentido, indica que la humillación o desprecio a las víctimas afecta directamente a su honor y a su dignidad, perpetuando su victimización, que es actualizada a través de esa conducta.

El pasado 23 de junio, la sala revisó en vista pública la condena de dos años de cárcel -el máximo legal por este delito- que la Audiencia Nacional impuso a la joven en febrero de 2016 por la gravedad de los comentarios escritos en la red social. Ahora le rebaja la pena un año al entender que la condena que se impuso en primera instancia era desproporcionada. Así, accede a establecer una condena más proporcionada a las condiciones personales de la acusada, al tratarse de una estudiante. Aún así, el Supremo afirma que la difusión de estas expresiones se hacen con conocimiento de que se transmite una ofensa pública a víctimas del terrorismo.

Carrero Blanco y ETA

Entre noviembre de 2012 y agosto de 2014, María Lluch publicó en Twitter con el seudónimo de Madame Guillotine frases para mofarse del atentado contra Carrero Blanco en 1973 como: «Voló, voló, Carrero voló y hasta las nubes llegó. Ay Carrero, el primer astronauta español»; o consignas como «maderos a la guillotina, ETA mátalos».

También enlazó desde su cuenta a vídeos de Youtube invitando a sus 790 seguidores a que se rieran de las imágenes de atentados y reprodujo mensajes del tipo: «¿Cómo monta Irene Villa a caballo? Con velcro» o «¿En qué se parece Miguel Angel Blanco a un delfín? En el agujero de la nuca».

La sentencia sienta un precedente y podría afectar a casos aún pendientes como el del líder del grupo rap metal Def con Dos, César Strawberry, cuyo juicio por este delito se celebró este martes en la Audiencia Nacional, o al del concejal de Ahora Madrid Guillermo Zapata, que será juzgado por un tuit sobre Irene Villa.