Javier Maroto: «El PSOE tendrá que elegir entre Pablo Iglesias y un Gobierno de moderación»

manuel blanco PONTEVEDRA / LA VOZ

ESPAÑA

CAPOTILLO

El exalcalde de Vitoria carga contra Unidos Podemos, que ve ya como referente de la izquierda, por delante de los socialistas

09 jun 2016 . Actualizado a las 08:09 h.

Javier Maroto (Vitoria, 1972) es un emergente. En el PP y en la política española. Tiene planta de dandi y verbo fácil. Ya sea para azotar a la también emergente alianza de Podemos e Izquierda Unida o para ponerle deberes al PSOE, al que no duda en situar como tercera fuerza política tras los comicios del 26J.

-La economía crece, el paro muestra síntomas de mejoría... Y, sin embargo, ocho de cada diez españoles dicen que la situación política es mala o muy mala. ¿En qué han fallado?

-La situación a la que nos ha llevado Sánchez de tener que repetir las elecciones ha enfadado a muchos ciudadanos, yo soy uno de ellos. Esa famosa frase del ?no es no, que parte del no no has entendido?, va a ser lo más conocido de Pedro Sánchez cuando deje la política. Mientras hemos estado seis meses mirándonos los unos a los otros intentando formar Gobierno, la gente de la calle sigue con problemas de desempleo, de incertidumbre sobre sus pensiones, de poder abrir su comercio todos los meses...

-Los sondeos previos sostienen también que después del 26J nos vamos a encontrar con un escenario muy parecido. ¿Qué pasará entonces?

-Hay un cambio muy importante, y es algo inédito en la política española. Hasta ahora, la alternativa al PP había sido el PSOE, y al Partido Socialista lo conocemos, tiene más errores que aciertos, pero es previsible. El grave giro de este momento político, que creo que es peligroso, es que la referencia de la izquierda ya no es el PSOE. Ahora es la coalición Podemos-Izquierda Unida, esos que van con el lema Somos comunistas. Esos son la alternativa al PP. Por eso, en este escenario, los que nos sentimos moderados, si agrupamos el voto en torno al PP, estaremos asegurando el voto en torno a la seguridad, a la certeza y al futuro frente al extremismo.

-Ha eludido mi pregunta. ¿Con quién va a pactar el PP después del 26J, porque no parece que vayan a surgir mayorías absolutas?

-No, no va a haber mayorías absolutas. Por eso, en esta coyuntura, el ofrecimiento que hacemos es de entendernos con los moderados, y eso pasa también por el PSOE, con quien estamos necesitados de entendernos. El Partido Socialista, cuando quede tercero, tendrá que elegir. O hace presidente a Pablo Iglesias, o permite un Gobierno de moderación.

-Albert Rivera ha dicho abiertamente que solo apoyará una eventual investidura del PP si Rajoy se marcha. ¿Se plantearía el partido un relevo si fuesen necesarios los apoyos de Ciudadanos para gobernar?

-No me voy a meter con Albert Rivera, sobre todo porque cada día dice una cosa distinta en torno a este asunto, ni tampoco con Ciudadanos, porque los respeto mucho. Pero las urnas han decidido que Ciudadanos sea irrelevante, y quien es irrelevante no puede decidir. La mayoría sólida solo la conforman PP y PSOE.

-La bajada de impuestos que anunció el candidato Rajoy, ¿es una de esas promesas electorales que se lleva el viento o es una medida viable?

-La bajada de impuestos está en los genes del PP, y no vamos a renunciar a ella, sobre todo porque se puede. Y lo hemos demostrado. Es cierto que subimos los impuestos al principio de la legislatura porque la situación era crítica; pero también los bajamos en cuanto hemos podido. Y cuando lo hemos hecho, por ejemplo en el 2015, subió la recaudación. Porque está demostrado que con el modelo del PP, cuando bajas los impuestos, hay más dinero en el mercado, se genera empleo y se activa la economía, con lo que se recauda más. Y lo vamos a volver a hacer.

-Pero Rajoy habla de ajustes, ¿cuáles serán esos ajustes?

-La palabra ajuste es muy amplia, pero para mí no es sinónimo de recortes. Ajuste es introducir medidas y reformas para favorecer el incremento de los ingresos. Ajuste no significa meter la tijera en la sanidad o en la educación, que yo estaría en contra, pero es que además no es necesario.

-Pablo Iglesias se erigía estos días como el nuevo estilete de la socialdemocracia. ¿Le concede usted ese protagonismo?

-Cuando su socio, el que va con él de la mano, el de los botellines, anuncia que su lema es Somos comunistas, pues lo deja en mal lugar. Son comunistas Iglesias, Garzón, Monedero, Errejón... Lo son porque lo han dicho, pero además lo son porque hacen lo que hacen los comunistas. Y yo no quiero eso para mi país.

 «Las ovejas negras de los telediarios no representan al partido»

-Le voy a poner en un aprieto; usted ha sido una de las voces más críticas contra los casos de corrupción en el PP. Haga un ejercicio de abstracción. ¿Votaría usted a un partido con una mochila tan cargada de manchas?

-Votaría a un partido que considera, como yo, que la única receta contra la corrupción es tolerancia cero. Y votaría a un partido como el PP que cuando lo conoces, descubres que la inmensa mayoría de las personas que lo forman simplemente quieren hacer el bien a su municipio, a su pueblo, a su barrio... Ese es el PP al que pertenezco. Los otros, esas ovejas negras de los telediarios, ni me representan, ni nos representan.

-¿Le ha faltado piel a su partido a la hora de afrontar este asunto?

-En el año en que he estado en la dirección nacional, no se puede ser más contundente y rápido. Granada, al día siguiente expulsión; Valencia, al día siguiente una gestora; Madrid, inmediatamente el mismo resultado, Soria, ni tres días... Eso es contundencia. Seguramente el debate requiere mucho más, pero ojalá viésemos este debate en otros partidos, porque lo más importante es actuar.