El plan de Iglesias para aliarse con IU lo enfrenta de nuevo con Errejón

Enrique Clemente Navarro
enrique clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Mariscal | Efe

El secretario general reconoce que hay diferencias ideológicas en el partido

20 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Pablo Iglesias está decidido esta vez a pactar con IU, aunque aún hay discrepancias con Alberto Garzón sobre la fórmula para ir juntos a las urnas. Según sus defensores, esta alianza permitiría el ansiado sorpasso del PSOE sumando el número de votos que las dos fuerzas obtuvieron el 20D, que se traducirían en más escaños que si fueran por su cuenta al aplicar la ley electoral. Pero también reforzaría el carácter de izquierda de Podemos, lo que tendría un coste entre los votantes más moderados. Íñigo Errejón es partidario de que el partido mantenga sus señas de identidad y un discurso más transversal para pescar también en el electorado de centro. Esta estrategia posibilista es la que triunfó en la asamblea constituyente de Vistalegre y la que se implementó el 20D. Pero las cosas han cambiado y el número dos de Podemos y los errejonistas han perdido fuerza. Los pablistas, con el apoyo de los anticapitalistas, comandados por la dirigente andaluza Teresa Rodríguez y el eurodiputado Miguel Urbán, apuestan por la confluencia con IU y por marcar distancias con el PSOE, el objetivo a batir.

Cuentos de ábacos

Errejón reiteró ayer su desconfianza sobre la posibilidad de que una alianza con IU dé como resultado una suma de los votos que ambas formaciones obtuvieron en las últimas elecciones generales, cinco millones y un millón, respectivamente. «Los cuentos de ábacos no funcionan casi nunca», afirmó el portavoz de Podemos en el Congreso. Señaló que es posible el entendimiento, pero advirtió de que si los acuerdos se hacen bien «multiplican», pero si se hacen mal «dividen». De esta forma, Errejón volvió a mostrar su oposición a la suma de siglas y defendió que la hoja de ruta de Podemos sigue siendo «no mirar solo a los que han votado una única cosa», sino a una mayoría «sin preguntar a la gente de dónde viene, sino adónde va».

Por su parte, Iglesias admitió ayer por primera vez las siempre negadas diferencias políticas en Podemos. Aseguró que conviven desde «los planteamientos quizás más radicales, entre comillas» que representa Urbán, «hasta los más moderados, entre comillas» de Errejón. «Yo no sé qué significan esas cosas, pero si eso es expresión de pluralidad, en Podemos pueden convivir ideas diferentes pero teniendo todos claro la dirección y el cambio político que queremos». Además, apostó por repetir las listas electorales sin celebrar de nuevo primarias.