El PP descarta llamar a Pedro Sánchez mientras siga jugando «a dos barajas»

Nuria Vega / A. T. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Javier Etxezarreta | EFE

Rajoy insiste en que «la gran coalición es la única opción seria y necesaria»

12 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En el PP no hay prisa para que Mariano Rajoy llame a Pedro Sánchez para hacerle una oferta de Gobierno en coalición. Es más, los populares ven muy probable que su presidente no se ponga en contacto con el secretario general del PSOE mientras juegue «a dos barajas», con el PP y con Podemos. «Hay tiempo para pactar, lo que no es serio es que se nos traicione o se nos instrumentalice para que llamemos y nos digan que no». El vicesecretario de comunicación del PP se refirió en estos términos tras la reunión del comité de dirección de su partido a las posibilidades de que Rajoy y Sánchez retomen el diálogo, interrumpido desde finales de febrero. Los populares sostienen que Rajoy no tiene nada que ganar si recibe un desplante del líder del PSOE, y no va a coger el teléfono si no tiene la certeza de que Sánchez tiene cierta predisposición para conversar.

Pablo Casado explicó que la base programática para el diálogo son las cinco ofertas de pactos de Estado sobre la unidad de España, Europa, lucha contra el terrorismo, Estado de bienestar y modernización institucional que expuso el presidente en funciones poco después de las elecciones, en ningún caso «las 200 medidas» del pacto entre el PSOE y Ciudadanos ni tampoco «las 20» planteadas por Podemos. El portavoz ratificó que la mejor alternativa es el acuerdo entre su partido, los socialistas y Ciudadanos, pero advirtió que el PP «no tiene miedo» a nuevas elecciones porque las encuestas demuestran que «no sufre desgaste» por el bloqueo político. Aunque Sáenz de Santamaría señaló que esa hipotética coalición «puede tener múltiples formas», el ministro Alfonso Alonso reconoció que el PP está dispuesto a ceder la vicepresidencia a Pedro Sánchez, y eso, dijo, los socialistas «lo saben desde el primer día».

El propio Rajoy insistió en Twitter en que «la gran coalición es la única opción seria y necesaria, nos une lo esencial». Pero no dio ninguna pista sobre el momento que escogerá para abordar este asunto con el secretario general del PSOE. En el PP creen que su líder dejará pasar la consulta que hará Podemos entre sus militantes entre el jueves y el sábado próximos sobre qué pacto prefieren, si el de los socialistas con Ciudadanos o el de las fuerzas de izquierda. Con ese calendario, la hipotética conversación, de producirse, tendría lugar a lo largo de la próxima semana, porque más allá del 25 de abril se estrecharían mucho los márgenes reglamentarios del Congreso para celebrar un nuevo debate de investidura con sus votaciones.

Rivera insta a los dos mayoritarios a sentarse a negociar

Albert Rivera sigue convencido de que no hay más salida para evitar las elecciones que una negociación urgente en la que se impliquen PSOE, Ciudadanos y PP, y de la que salga un programa de reformas aceptado por los tres y un nuevo Gobierno apoyado de alguna manera, con el sí o la abstención, por los dos grandes partidos. Por este motivo, aseguró este lunes que, si el PP no mueve ficha en los próximos días, está dispuesto a realizar un último intento de mediación y llamar por teléfono a Mariano Rajoy para tratar de convencerlo de que permita acudir a sus representantes a la mesa de negociación a la que su partido y los socialistas les citaron el 8 de marzo. Eso sí, también dejó claro que en el fondo todo se reduce a un problema de «voluntad política», ante el que si el líder popular o su homólogo socialista frustran el encuentro, «yo, con solo 40 diputados en el Congreso, no podré hacer mucho más».

El líder de Ciudadanos sabe que el problema de los nombres es el que bloquea toda posible negociación e instó a los dos partidos mayoritarios a superar esos prejuicios. Señaló que de lo último de lo que hablaría si al final es posible abrir una negociación entre PSOE, PP y Ciudadanos es de quién presidiría el Gobierno, pero avanzó que no descarta ninguna posibilidad, incluido que el candidato pudiese ser un político popular que no fuese Rajoy. El presidente en funciones, repitió, está incapacitado para esa labor porque el próximo Ejecutivo tiene que liderar la lucha contra la corrupción y abrir una nueva etapa de regeneración.

PSOE y Ciudadanos rechazan por ilegal una propuesta de Justicia de recortar la campaña electoral

El ministro de Justicia se descolgó este lunes con una propuesta que en pocos minutos se convirtió en una de las polémicas políticas del día. Rafael Catalá animó a los distintos partidos a debatir si puede existir «algún instrumento legal» que permita reducir la duración de la campaña electoral si al final hay comicios el 26 de junio. El titular de Justicia indicó que quizás pueda haber algún tipo de alternativa para que sea más breve de los quince días que fija como duración tasada la ley electoral, para «no dar tanto la lata» a los ciudadanos por segunda vez en seis meses.

El PSOE contestó poco después al ministro que lo que propone es imposible, porque sería «saltarse la ley y la Constitución», y añadió que, de hecho, él debería ser el primero en saberlo y respetarlo. El portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, explicó que ni es posible buscar atajos a algo que la norma electoral fija de manera taxativa ni existe, ahora, a solo tres semanas de que se puedan disolver las Cortes por falta de nuevo Gobierno, tiempo material alguno para abordar una reforma de esta ley, ni siquiera por los procedimientos de máxima urgencia.

Hernando indicó que lo que sí es posible es buscar un acuerdo de los partidos para que al menos se reduzcan los gastos electorales, que se sufragan con dinero público. El portavoz socialista, como una de las posibilidades, apuntó a un acuerdo para no realizar buzoneo de las papeletas de los partidos, lo que permitiría un ahorro de muchos millones.

Ciudadanos también se mostró partidario de que si hay que repetir las elecciones en junio se reduzca «drásticamente» el gasto electoral de los partidos y las subvenciones que reciben, pero en ningún caso aceptó que se reduzcan actos de campaña como los debates, que «son gratis».