Durante un homenaje en San Sebastián, el líder aberzale aboga por abrir un segundo frente secesionista contra el Estado
06 mar 2016 . Actualizado a las 01:14 h.Unas diez mil personas asistieron ayer en el velódromo donostiarra de Anoeta al primer mitin de Arnaldo Otegi tras su salida de la cárcel, un homenaje que se convirtió en una exaltación del independentismo y que contó con la participación de representantes de Anova, BNG y Cerna.
Otegi entró en el velódromo entre el griterío y los aplausos del público, a los que saludó con el puño izquierdo en alto. Estuvo flanqueado por Rufi Etxeberria, uno de los principales ideólogos de la izquierda aberzale, y Hasier Arraiz, presidente de Sortu.
El llamado a ser candidato a lendakari por parte de EH Bildu si la Justicia se lo permite -está inhabilitado por sentencia para cargo público hasta el 2021- afirmó que «no nos detendrán hasta lograr la independencia», por lo que reclamó a «la nueva izquierda española», en clara referencia a Podemos, poner en marcha «procesos constituyentes en las naciones del Estado».
Otegi señaló que en el futuro hay dos opciones. Una es «construir la democracia en los Estados español y francés» hasta que se reconozca al pueblo vasco «como nación diferenciada» y se reconozca «su derecho a decidir». Se mostró convencido de que esa opción no se producirá, por lo que trazó la segunda «en la que creo, la de construir un Estado propio». En alusión al desafío catalán, abogó por abrir un segundo frente contra el Estado.
Reclamó «temple, serenidad y mantener el pulso», frente a las «provocaciones», porque «ser amables no consiste en ser débiles sino en tener el puño apretado dentro de un guante de seda». «Nos quieren tristes, desilusionados, frustrados, pero para tristes ya están ellos», afirmó, para recordar, a continuación, que hace siete años la izquierda aberzale «hizo un cambio estratégico» y «el tiempo nos ha dado la razón».
Durante el acto se leyó un mensaje del exsecretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, el único condenado por el caso Bateragune que continua en prisión y que, desde la cárcel, animó a la ciudadanía «a seguir peleando» por los derechos de los reclusos.
Representantes de Anova califican al dirigente aberzale de referente político
Diversos miembros de las formaciones políticas gallegas Anova-Irmandade Nacionalista, BNG y Cerna, asistieron al acto de bienvenida a Arnaldo Otegi en el velódromo de San Sebastián tras su salida de la cárcel. Por parte de Anova-Irmandade Nacionalista estuvieron los miembros de la comisión permanente Tania Bouzo y Dani Conde. Esta formación definió a Otegi como «un símbolo que trasciende los marcos del activismo y del espacio social y político aberzale».
Por parte del BNG, estuvieron presentes diversos cargos como Bieito Lobeira, Rubén Cela y Noa Presas, y también una delegación de Cerne. Al velódromo de Anoeta acudieron, además de diversas formaciones vascas, representantes de Asturias, Cataluña (CUP y ERC), Aragón, Castilla y Andalucía. Asimismo, el presidente del Sinn Féin, Gerry Adams y el expresidente sudafricano Kgalema Motlante son algunas de las personalidades que mostraron su apoyo a Arnaldo Otegi tras su excarcelación, según datos de Sortu.