Puigdemont impulsa su primera «ley de Estado»

EFE

ESPAÑA

Toni Albir | EFE

Trata sobre el cambio climático y lo ha hecho antes de iniciar la ronda de contactos con los partidos a los que el presidente catalán trasladará su voluntad de diálogo

26 ene 2016 . Actualizado a las 20:42 h.

El Govern de Carles Puigdemont ha impulsado este martes su primera «ley de Estado», sobre el cambio climático, antes de iniciar la ronda de contactos con los partidos, a los que el presidente catalán trasladará su voluntad de diálogo para que la legislatura transcurra dentro de la normalidad institucional.

Para allanar el terreno de la ronda de contactos con la oposición, Carles Puigdemont y la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, se han reunido en el Palau de la Generalitat durante una hora en su primer encuentro institucional. Según fuentes de la Generalitat consultadas, Forcadell ha explicado el inicio de las comisiones parlamentarias, entre ellas las del proceso constituyente, mientras que el presidente catalán ha manifestado su voluntad de diálogo con todos los grupos del arco parlamentario, con el objetivo de otorgar «normalidad institucional» a la legislatura, al margen de la duración que finalmente tenga -dieciocho meses, en principio-.

En la reunión del Consell Executiu por la mañana, Puigdemont ha trasladado también a los consellers la intención de reunirse en las próximas semanas con los líderes de la oposición, con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y con los diferentes agentes sociales y económicos.

Este miércoles se celebrará el primer encuentro, con la presidenta de Ciutadans en el Parlament, Inés Arrimadas, que ha sido formalmente nombrada jefa de la oposición, aunque ha renunciado ya a todas las prerrogativas del cargo.

El jueves, el presidente catalán seguirá los contactos con el líder del PSC, Miquel Iceta, hasta reunirse con todos los grupos del Parlament (SíQueEsPot, PPC y CUP), siempre con «voluntad de diálogo con todo el mundo», según ha expresado la consellera de Presidencia y portavoz, Neus Munté. La consellera ha comparecido en rueda de prensa acompañada del titular de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, tras la reunión del Consell Executiu presidido por Puigdemont, que ha aprobado su primer proyecto de ley, orientado a combatir el cambio climático.

«Una ley de Estado», en palabras de Rull, que incluye una nueva figura tributaria sobre emisión de gases contaminantes de turismos y furgonetas, que se aplicará progresivamente a partir del 2018. Además, el Consell Executiu ha nombrado a Ferran Mascarell, exconseller de Cultura de Artur Mas (CDC) y Pasqual Maragall (PSC), como delegado de la Generalitat en Madrid. Mascarell se incorpora en un contexto incierto en las relaciones entre la Generalitat y el Estado, a la espera de que se configure el nuevo Gobierno central.

En todo caso, la consigna del Govern es la de preservar el rol institucional y no entrar a valorar el baile de nombres, alianzas y propuestas para el futuro Gobierno.

Así, ante las preguntas de los periodistas, Munté ha evitado posicionarse sobre las negociaciones para formar el nuevo Gobierno, aunque sí que ha cuestionado la propuesta de Podemos de un Ministerio de Plurinacionalidad: «Para hacer un referéndum sólo es necesario voluntad política», ha resaltado.

Por su parte, el vicepresidente y conseller de Economía y Hacienda de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha considerado en una entrevista en el Financial Times que los gobiernos extranjeros y los mercados financieros pueden desempeñar un papel clave en el proceso de independencia de Cataluña.

En el Parlament, los grupos se han repartido las 29 comisiones, la mitad de las cuales serán presididas por diputados de Junts pel Sí. La coalición de CDC y ERC dispondrá de 13 presidencias -además de las dos que por reglamento le tocan a Carme Forcadell como presidenta-, entre ellas la del proceso constituyente, que podría ser presidida por la expresidenta de Òmnium Cultural Muriel Casals.