El nuevo protocolo de riesgo de violencia machista evaluará amenazas en redes sociales

Daniel Roldán MADRID / COLPISA

ESPAÑA

benito ordoñez

Los celos y las nuevas relaciones no aceptadas por la expareja se añaden como indicadores para valorar el peligro de las víctimas

28 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de varios meses de estudio, de analizar la situación y de consultar a expertos, el Ministerio del Interior ya tiene listo el nuevo protocolo de valoración de riesgo de las víctimas de violencia machista. Una puesta a punto que estaba prevista para abril, pero que las consultas externas han postergado hasta el año que viene. Porque desde septiembre y hasta finales de marzo convivirán los dos formularios que servirán para comprobar «si la información facilitada que ofrece es buena a la hora de medir el riesgo», señaló el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez.

Este nuevo protocolo del sistema de seguimiento integral en los casos de violencia de género (sistema Viogen) va a incorporar nuevas realidades que en el 2007, cuando comenzó a funcionar, no estaban tan desarrolladas como ahora. Martínez puso como ejemplo el acoso que las víctimas de violencia machista sufren a través de las redes sociales o las nuevas tecnologías de comunicación. También pretende este nuevo formulario «individualizar mejor el nivel de riesgo» analizando los aspectos más vulnerables de la víctima. Discapacidad, embarazo, enfermedad grave o si es extranjera son nuevos baremos que aparecen dentro de este sistema para evaluar el riesgo. Carecer de apoyo familiar o social favorable, tener diagnosticado un trastorno mental y psiquiátrico, muestra o ideas de suicidio o antecedentes familiares de violencia machista son otras de las cuestiones añadidas.

El nuevo documento de Viogen, un modelo que dispone de más de 30.000 usuarios tanto de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado como de otras entidades (policías locales y autonómicas) y sociales, cuenta con ocho indicadores que evalúan la situación más íntima de la víctima después de la última valoración: si depende económicamente del agresor, si hay menores o familiares a su cargo o existen trámites judiciales de separación o divorcio no deseados por el agresor, si el agresor muestra celos exagerados o si la mujer ha entablado una nueva relación sentimental no aceptada por su expareja. También se realizan consultas sobre la situación laboral, sentimental y familiar del agresor.

Además, de este nuevo protocolo, el número dos del Interior, que asistió a una reunión sobre violencia machista con la vicepresidenta del Gobierno y los titulares de Justicia, Educación y Sanidad, añadió que la aplicación Alertcops, que se puede descargar en los teléfonos móviles para denunciar delitos, tendrá una pestaña específica para la violencia machista.

Diez años de la ley

El ministro de Sanidad anunció que acudirá al Congreso para presentar una evaluación de la década de aplicación de la ley contra la violencia machista. «Diez años después, España es referencia de todos los países y uno de los más concienciados en el combate contra esta violencia. Es puesto como ejemplo en todo el mundo», recalcó Alonso, que incidió en la necesidad de «una política de Estado» para luchar contra esta lacra.