Esperanza Aguirre quiere expulsar a José Miguel Moreno, que dijo que era diputado «para tocarse los huevos»

EFE MADRID

ESPAÑA

Emilio Naranjo | EFE

La presidenta del PP de Madrid considera que no es suficiente solamente con la supensión de militancia

28 jul 2015 . Actualizado a las 23:36 h.

La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, propondrá que el partido expulse de sus filas al exdiputado de la Asamblea y exalcalde de Valdemoro José Miguel Moreno, quien, según el sumario del caso Púnica, dijo que estaba en su cargo «tocándose los huevos» y que para eso se había hecho diputado.

«No me basta la suspensión de militancia», ha dicho Aguirre sobre Moreno, antes de asistir al Foro ABC-Deloitte protagonizado por la presidenta regional, Cristina Cifuentes.

La presidenta popular ha recordado que mañana se reúne el Comité de Derechos y Garantías del PP regional, y que va a proponer que se expulse del partido a Moreno por unas frases que «a todos nos avergüenzan y abochornan».

También ha mencionado al segundo teniente de alcalde de Collado Villalba, Alberto Sánchez Caballero (a quien ayer apartó de sus responsabilidades la alcaldesa, Mariola Vargas, tras conocerse su imputación en la trama), y ha remarcado que él mismo pidió la suspensión de militancia en el partido «hasta que esto se aclare».

Ha celebrado, a este respecto, que la alcaldesa optase por apartarle de sus funciones porque «nuestro compromiso es que cualquier imputado debe abandonar las filas del PP».

Aguirre ha dicho sentirse «abochornada, responsable e indignada» por el caso Púnica, pero ha remarcado que «de ninguna manera» puede consentir que se piense que ella fue «consentidora» de los hechos.

La presidenta de los populares madrileños ha recordado que ella ha hecho más de 500 nombramientos y «dos me han salido rana. Ahí tomo prestada la frase de (Juan Carlos) Monedero, que aparte de casarme con su padre, dice que hasta a Jesucristo le salió rana uno de doce. Lo que no quiere decir que eso sea excusa o paliativo», ha apuntado.

Según ha afirmado, «desde el minuto uno» en el que ella tuvo «la más mínima sospecha o indicio» de irregularidad cesó a quien tuviera responsabilidades, y como ejemplo ha citado a Francisco Granados, número dos del partido a quien retiró su confianza y le apartó de todos sus cargos en el Gobierno «tres años antes de que se supiera lo de sus cuentas en Suiza».

Tras insistir en que lo importante es «que todo se aclare», ha destacado que no le consuela el «más eres tú» y las comparaciones con otros casos de corrupción que afectan a otros partidos, aunque sí ha matizado que la trama que supuestamente afecta a la familia Pujol o los ERES en Andalucía son «cuantitativamente muchísimo más importantes».

Esperanza Aguirre ha pedido que los jueces aclaren «rápidamente» las imputaciones, porque «no puede ser que ahora se levante el secreto de sumario para unas cosas y, en cambio, se hace una pieza separada para otras».