Rajoy reivindica su actuación con las víctimas pero la hija de Vidal-Abaca le echa en cara la excarcelación de etarras

Europa Press

ESPAÑA

Ballesteros | EFE

 Ana Velasco critica también la presencia de Bildu en las instituciones y lamenta las vulneraciones de la ley por «pura debilidad política»

07 jul 2015 . Actualizado a las 19:48 h.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado este martes que las víctimas del terrorismo ocupan un «lugar insustituible» en sus «pensamientos» y en su «acción política», y ha subrayado que quiere que estén presentes en la vida pública para forjar «el relato de una España constitucional» capaz de derrotar «con la ley» al terrorismo y a sus cómplices.

Así se ha pronunciado durante la entrega a título póstumo de la Medalla de la Orden del Mérito Constitucional a la fundadora de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ana María Vidal.Abarca, un acto en el que su hija Ana Velasco ha criticado la presencia de Bildu en las instituciones, las excarcelaciones de miembros de ETA tras «ridículos cumplimientos de condena» y las «vulneraciones» de la ley causadas por la «pura debilidad política».

A este homenaje que ha celebrado en el Complejo de la Moncloa han asistido también la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y los ministros Jorge Fernández Díaz (Interior) y Alfonso Alonso (Sanidad). También han acudido la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mari Mar Blanco, la actual presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza, la presidenta de la fundación Gregorio Ordóñez, Ana Iríbar, y numerosos familiares de la fallecida Ana María Vidal-Abarca.

Preocupada por las «cesiones» y las «excarcelaciones»

Velasco ha afirmado que en los últimos tiempos su madre confesaba estar «triste» ante el hecho de que se hubiese «tolerado» la presencia institucional de partidos -en alusión a Bildu- cuya ideología «se sustenta en la justificación indisimulada de la maldad absoluta que representa el terrorismo, por mucho que sus Estatutos digan otra cosa, y en la voluntad de destrucción de la patria común e indisoluble».

También ha dicho que Ana María Vidal-Abarca estaba «inquieta» por «las opacidades» y por «las cesiones». «Estaba dolorida por las excarcelaciones tras ridículos cumplimientos de condena de los más atroces asesinos en serie y preocupada por los casi 400 asesinatos cometidos por ETA aún sin resolver», ha aseverado.

Asimismo, Ana Velasco ha censurado las «vulneraciones» de la ley que se han producido y que, a su entender, han sido «causadas por pura debilidad política y por la falta de fe en la superioridad moral de la democracia española». Según ha añadido, a su madre le preocupaba el «olvido colectivo», la «indiferencia» y la «dejación en la obligación moral de asentar con claridad ante la sociedad y para la historia la verdad de la brutal persecución política padecida por los nacionalistas en el País Vasco».

Una vida «ejemplar» en defensa de la libertad

Tras estos reproches, el jefe del Ejecutivo ha tomado la palabra y ha justificado este acto de homenaje a Ana María Vidal-Abarca, una mujer con una vida «ejemplar» que se ha convertido en «referente de la libertad y testimonio de esperanza para millones de españoles». A su entender, su labor pionera en defensa de las víctimas es un ejemplo de «altruismo y patriotismo excepcionales en la España contemporánea».

«La libertad y la democracia en España nunca se han defendido solas. Ha sido necesario el testimonio de vida de algunos de nuestros mejores hombres y mujeres para hacer realidad el sueño de una nación en concordia y libertad», ha enfatizado, tras recordar que con su labor contribuyó a mostrar al mundo en toda su dureza «el terror» y la «injusticia» de ETA.

Según Rajoy, la actuación de Ana María Vidal-Abaca es «clave» para desarticular moralmente el relato de los terroristas y afirmar los valores de la España democrática. «Es una medalla ganada a pulso y con plena justicia, y con ella reconocemos el papel que tuvo y su claridad moral frente al chantaje y al terror etarra», ha apostillado.

Tras recordar que esta «luchadora por la libertad» sufrió en sus «carnes» el terrorismo tras asesinar ETA en 1980 a su marido, el jefe de la Policía Foral de Álava Jesús Velasco, ha asegurado que el Gobierno necesita el «compromiso y ejemplo cívico» de las víctimas del terrorismo. «Os queremos presentes en la vida pública. Nos es imprescindible vuestro testimonio para forjar el relato de una España constitucional capaz de derrotar, con la única fuerza que tienen los demócratas, que es la ley, y con la contundencia de la razón, al terrorismo, a sus cómplices y a sus coartadas», ha resaltado.

Dicho esto, ha asegurado que este homenaje a la exfundadora de la AVE es un reconocimiento a todas las víctimas y una prueba «visible» del afecto que les tienen todos los españoles, ya que, según ha dicho, ocupan un «lugar insustituible» en los «pensamientos, corazón y acción política» de todos.

Mari Mar Blanco: una mujer valiente y generosa

También ha realizado una breve intervención la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Mari Mar Blanco, quien ha afirmado que Vidal-Abarca fue la voz de quienes padecieron el terror en los años más duros y es un «ejemplo de superación constante».

«Una mujer valiente y generosa que anima a todas las víctimas a continuar esta batalla contra el terror», ha manifestado Blanco, para añadir que gracias a la labor de la expresidenta de la AVT los españoles empezaron a tomar «más conciencia del drama» que estaban viviendo con el terrorismo.