El ministro del Interior afirma que los pitos fueron una «una incitación al odio» que no debe «quedar impune»
02 jun 2015 . Actualizado a las 16:07 h.El conseller de Presidencia, Francesc Homs, ha afirmado que el Gobierno tiene «tirria» a Cataluña y hace el «ridículo hasta unos límites insospechados», ante la pitada al himno, ya que la Audiencia Nacional ya señaló en el 2009 que estas manifestaciones están amparadas por la libertad de expresión.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del ejecutivo catalán, Homs ha acusado al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, de ser «negligente» por calificar la pitada del sábado en la final de la Copa del Rey de fútbol de «incitación al odio» que no debe «quedar impune». «Demuestran una calidad democrática baja», ha lamentado Homs, que ha señalado que lo que ha cambiado entre el pronunciamiento de la Audiencia Nacional del 2009 -que ha leído en la conferencia de prensa- y la actualidad es que en estos momentos hay una «tirria absoluta del Gobierno español a los catalanes».
Ante la propuesta de modificaciones legislativas para hacer frente a pitadas al himno, el conseller, que ha dicho que no está a favor de silbar símbolos nacionales, ha acusado al PP de pretender por ley establecer «manu militari» y por «mayorías absolutas» lo que es «la visión de parte».
Preguntado por las críticas por la postura sonriente del presidente catalán, Artur Mas, durante la pitada al himno en el Camp Nou, Homs ha dicho que no se dedicará a «analizar expresiones del rostro de nadie» porque, ha añadido, sería situarse en el «terreno infinito de la especulación».
La contestación de Homs se produce tras las declaraciones del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz en las que asegura que había sido una «incitación al odio» que no debe «quedar impune». «No cabe la menor duda de que fue una incitación al odio», indicó el ministro en declaraciones a los medios españoles durante la reunión de titulares de Interior de G6 -Alemania, Francia, Italia, Reino Unido, Polonia y España- en el castillo de Moritzburg, respecto a lo ocurrido en el Camp Nou, el pasado sábado. Lo sucedido fue «un escarnio contra el jefe del Estado y el himno nacional», añadió Fernández Díaz, que además «ofendió» a millones de españoles. «Hay millones de españoles, entre los que humildemente me incluyo, que nos sentimos profundamente dolidos ante esa actuación contra el rey y contra el himno», insistió el ministro.
Fernández Díaz rechazó asimismo la actitud de «ciertos dirigentes políticos catalanes», que se han manifestado en contra de adoptar cualquier tipo de acción tras los incidentes o que «pretenden que no se castiguen esas acciones». «Yo les hago la siguiente reflexión: cómo se sentirían si se produjera una acción similar contra el himno de Cataluña o contra el himno del País Vasco», argumentó el titular de Interior, quien aventuró que, en ese caso, «y con razón», se sentirían profundamente dolidos y humillados. A su juicio, «hay algunos que tienen la piel muy fina, especialmente entre los políticos catalanes», ya que «ven la paja en el ojo ajeno y no ven la viga en el propio». El ministro aseguró, por lo demás, que tales actitudes «no pueden quedar impunes» y recordó que tal como se sanciona en los estadios -«lo que me parece muy bien»- actitudes racistas o insultos por cuestiones de religión o etnia se debe actuar también contra «las ofensas a los símbolos de España», algo que, insistió, «humilla a millones de españoles».
Tras las reunión de la Comisión Antiviolencia de ayer en la que anunció que se abrirá expediente a las entidades que promovieron los pitos, el Gobierno Vasco ha considerado que lo procedente es hacer «pedagogía social» de respeto hacia los símbolos que representan a las instituciones, en lugar de promover sanciones. El portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Erkoreka, ha reiterado el análisis que ayer realizó el lehendakari Iñigo Urkullu cuando aconsejó «reflexionar sobre el respeto a las instituciones» en el conjunto de España. El Gobierno Vasco estima que «las pitadas a los símbolos políticos pueden ser el reflejo de una cierta desconsideración institucional», pero «debe prevalecer el respeto institucional», ha dicho Erkoreka. A su entender, «frente a ese tipo de actuaciones lo que procede son estrategias de pedagogía social, no reacciones sancionadoras ni la puesta en marcha de mecanismos judiciales» contra quienes han realizado actuaciones, que «son expresiones de la libertad de expresión, que pueden compartirse o no».
Por su parte, desde el PSOE el portavoz en el Congreso, Antonio Hernando, ha dejado claro su condena a la pitada al himno español durante la final de la Copa del Rey al considerarlo una falta de respeto, pero cree que «no es bueno» legislar en caliente como quiere hacer el PP. Hernando ha dicho en una rueda de prensa en la Cámara que es muy complicado legislar «ante una manifestación de la libertad de expresión», ya que es «muy difícil» controlarlo legalmente. Ha recordado que ya hubo una iniciativa similar en 2005, a propuesta de las Cortes Valencianas, y el Congreso la rechazó por abrumadora mayoría (321 votos en contra). Ha insistido en que se trata de una cuestión que hay que «dimensionarla» en su justa medida y hay que evitar utilizar las instituciones en favor de determinadas «dinámicas» electorales, como quiere hacer el PP, ha dicho el portavoz.
El presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, ha abogado por «demandar las responsabilidades oportunas» al considerar que con la pitada al himno nacional en la final de la Copa del Rey «se creó un riesgo y una situación de peligro que no se puede desdeñar». «Hubo quien alimentó un motivo de enfrentamiento sobre aspectos que pueden ser considerados por la mayoría de la gente muy importantes», ha señalado en declaraciones a los periodistas tras firmar en Pamplona un Convenio de Colaboración entre la Real Federación Española de Balonmano y Loterías y Apuestas del Estado. Según ha señalado, «miles de personas tuvieron que soportar de manera estoica» que el acontecimiento deportivo al que habían acudido «se estuviera ofendiendo a símbolos que son muy importantes» para esas personas. El presidente del CSD ha insistido en que es «oportuno recordar» que en los acontecimientos deportivos de masas hay «todo un protocolo» fruto del «saber acumulado durante mucho tiempo» sobre las prácticas «oportunas». En este contexto, ha citado como ejemplos la separación de aficiones, el control en los accesos y los partidos de «alto riesgo» donde se evita que las aficiones salgan simultáneamente.
Xavi: «Se debería valorar el porqué de los pitos y no sancionar»
El jugador azulgrana Xavi Hernández se ha mostrado contrario a sancionar al Barcelona y al Athletic Club de Bilbao por la pitada al himno español durante la final de Copa del Rey al asegurar que «todo el mundo puede opinar» y ha instado a los políticos que deberían preguntarse los motivos de los silbidos. «Fue una pitada espectacular, pero estamos en democracia y todo el mundo puede opinar. Se debería valorar el porqué de los pitos y no sancionar», ha asegurado el capitán del Barcelona en la jornada abierta a los medios de comunicación previa a la final de la Liga de Campeones.