Reconoce lo ocurrido en Andalucía como un «mal resultado», pero no extrapolable al resto de España
24 mar 2015 . Actualizado a las 00:08 h.Alberto Núñez Feijoo, presidente del PP gallego y uno de los barones con más ascendencia en el partido a nivel estatal, no ha dudado esta mañana en calificar el apoyo electoral recabado por su formación en Andalucía como un «mal resultado», que no es extrapolable ni al conjunto de España ni al resto de comunidades. Sobre el descenso de sufragios en el territorio andaluz, el líder popular ha asegurado que el PP está haciendo las cosas bien, pero tiene que explicarlas.
Como ya ha hecho Rajoy en anteriores ocasiones, Feijoo ha puesto así el foco en un problema de comunicación porque, a su juicio, los ciudadanos no entienden por qué se toman una serie de decisiones, aunque sean las correctas para que el país recupere la senda de crecimiento. El presidente de la Xunta no ha dudado en admitir el buen resultado de los socialistas porque cuando se gobierna en época de crisis no es fácil reeditar victorias, ha dicho en relación a Susana Díaz. Feijoo considera que para valorar «con cierta objetividad» el resultado del PP en Andalucía y de su candidato, Juan Manuel Moreno, hay que esperar al segundo tiempo, en alusión a los comicios municipales del próximo mes de mayo, aunque ha reconocido que «queda trabajo por delante».
El líder de los populares gallegos también se ha referido a otras dos formaciones. Sobre Podemos ha señalado que se ha quedado por debajo de sus expactativas y sobre Ciudadanos, la gran sorpresa y la gran amenaza ahora en el granero de votos populares, Feijoo ha asegurado que «desconoce cuál es su ideología». «Es todavía muy pronto para hacer una reflexión, habrá que ver qué decisiones toma», ha dicho. El presidente de la Xunta, que ha acompañado esta mañana en Santiago al ministro García Margallo en un foro sobre la marca España, ha recordado que otras formaciones de centro, como UPyD, que irrumpieron con fuerza en otras comunidades, ha tenido en cambio un impacto muy residual en la comunidad gallega.