Poner antes de final de año al alcance de los ciudadanos la nueva sede judicial electrónica, que permitirá el acceso del ciudadano a la administración de Justicia las 24 horas del día para informarse y realizar determinados trámites -no se concreta cuales-, es el objetivo del plan para la aceleración de la Justicia en entornos digitales presentado ayer por el ministro Rafael Catalá.
En esa nueva sede judicial electrónica, cualquier persona inmersa en un proceso judicial podrá tener conocimiento de cómo van sus trámites con la Justicia 24 horas al día los 7 días de la semana. Con lo que denominó «Justicia abierta», el sucesor de Gallardón pretende establecer «una nueva relación con la sociedad en el entorno digital, haciendo de la Justicia una actividad más próxima, accesible y transparente». Y con la «Justicia móvil», implantar el uso de SMS para avisar a las personas inmersas en un proceso judicial de la fecha fijada para el inicio de un juicio o, en su caso, la de su suspensión.
Cuenta con disponer para después del verano de una primera versión de la aplicación para móviles de Lexnet, la plataforma de intercambio seguro de información entre órganos judiciales y operadores jurídicos.
Para esas mismas fechas, si se cumplen las previsiones, ya no será necesario a acudir al Registro Civil a notificar nacimientos y defunciones. De ello se encarga el personal sanitario y lo hará de forma telemática.
La comunicación de requisitorias a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado se hará mediante correo electrónico, como se realiza ya en 72 juzgados de Madrid. A principios del 2016 será obligatoria la comunicación electrónica entre los colectivos jurídicos y las sedes judiciales.
El expediente digital, que ya se ha puesto en marcha en la Audiencia Nacional, se extenderá al resto del territorio que gestiona el ministerio -los que no tienen transferidas las competencias de Justicia- comenzando en los juzgados de Cuenca a mediados de año.
El plan 2015 cuenta con un presupuesto de 56 millones de euros. Con él, el Gobierno quiere hacer realidad la ansiada Justicia digital concretada en dos ideas: Justicia sin papel y Justicia en Red.