Pedro Sánchez acusa a Rajoy de haber generado un «destrozo descomunal»

Enrique Clemente Navarro
enrique clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

benito ordoñez

«Precariedad, impuestos y Bárcenas, por eso pasará a la historia», le espetó

25 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Pedro Sánchez se lo jugaba todo en su debut en el debate sobre el estado de la nación. Y por eso salió al ataque desde el primer minuto, con acusaciones muy duras y continuas descalificaciones a Mariano Rajoy, a quien acusó de mentir, aumentar la desigualdad y la pobreza, destrozar la cohesión social y permitir la corrupción. De entrada, le espetó que pasará a la historia como el presidente «de la precariedad, los impuestos y Bárcenas».

El líder socialista trató de desmontar el triunfalismo de Rajoy y mostrar la cara b de la recuperación, que, dijo, es falsa e injusta, porque no llega al 90 % de la población. Y le acusó de estar alejado de la calle. «¿Usted qué sabe de los españoles¿ O mejor dicho, cuando habla de los españoles, ¿a qué españoles se refiere?», le dijo. «Su autocomplacencia está injustificada, no se la cree ni usted, es una pose electoral». Para Sánchez, todo lo que va bien en la economía depende de factores externos, la bajada del precio del petróleo, la depreciación del euro y las acciones del BCE, y lo que va mal, del Gobierno. «La realidad son 584.00 empleos menos y 100.000 empresas menos desde que está en la Moncloa», afirmó.

Sí hubo rescate

Asimismo, descalificó la piedra angular del discurso del presidente, al acusarle de mentir al proclamar que había evitado el rescate. «Sí hubo rescate, con hombres de negro, con troika y con memorando incluido, y todo por salvar al soldado Rato», afirmó enseñando las primeras páginas de varios diarios. «Rescue en inglés es rescate», le dijo con el Financial Times en la mano. «Van 70.000 millones de euros pagados por los contribuyentes, cuando el señor De Guindos dijo que no iba a costar un céntimo», aseguró.

El secretario general del PSOE minimizó las medidas avanzadas por Rajoy, después de «tres años de destrozo descomunal», algunas anunciadas ya varias veces. «¡Ya está bien!, usted ya no engaña a nadie, porque casi todo lo que ha anunciado aquí son o bien incumplimientos o rectificaciones», señaló. Asimismo, le acusó de «deshacer» el Estado de bienestar y denunció su política fiscal. «Subir el IVA y amnistiar el gran fraude, dureza con los honrados, benevolencia para los defraudadores, esa es su política fiscal», dijo. Pero no se limitó a la economía, sino que atacó con la corrupción para concluir que la regeneración democrática «llegará de la mano de su jubilación democrática», tras preguntarse qué pensarán de España en el exterior sabiendo que el PP tiene militantes como Bárcenas. «Su regeneración democrática es golpear a martillazos el ordenador de Bárcenas en la sede del PP».

Defendió su reforma constitucional y criticó tanto el inmovilismo de Rajoy como a quienes «proponen liquidarla», en alusión a Podemos. «Con ellos insultan la memoria de generaciones que lucharon porque España tuviera democracia», dijo.

Sus propuestas

Esbozó brevemente sus propuestas: aprobar un nuevo estatuto de los trabajadores, derogar la reforma laboral y subir el salario mínimo, reindustrializar la economía, fortalecer las políticas de empleo y reformar el sistema fiscal y perseguir el fraude. Para finalizar su intervención dijo que no podía perdonar a Rajoy que pretenda que muchos españoles se resignen a vivir peor que en el pasado.

El cara a cara con Rajoy fue de una enorme dureza. Sánchez llegó a espetarle: «son ustedes los que no tienen vergüenza» y le acusó de ser «incapaz de ver su propia realidad». Aseguró que no aceptaba ninguna lección sobre corrupción del presidente. «Lecciones de usted sobre corrupción, ninguna, yo soy un político limpio», exclamó en dos ocasiones. Y volvió a atacarle a cuenta de Bárcenas. «Jamás será creíble sobre la corrupción, su nombre y su historia están indisolublemente unidos a Bárcenas», afirmó.

Respondió tibiamente a los ataques de Rajoy a Susana Díaz, que auguró ganará las elecciones.