Los socialistas gallegos desactivaron el pasado septiembre en A Coruña una operación como la de Madrid
12 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El líder de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, fue conocedor en primera persona de la decisión tomada por Pedro Sánchez y el resto de la ejecutiva federal del partido, de la que el propio Besteiro forma parte como único representante gallego, de destituir de manera fulminante a los miembros de la dirección del PSOE madrileño y a su secretario general, Tomás Gómez, para nombrar en su lugar una comisión gestora.
Fuentes del PSdeG sostienen que Besteiro estaba al corriente de la operación, pues la avaló implícitamente al ser consultado por el propio Pedro Sánchez telefónicamente, así que, con toda probabilidad, también avalará con su voto esta decisión en la próxima reunión que celebre la ejecutiva federal, dado que ayer no se reunió este órgano, sino únicamente la «comisión permanente de la ejecutiva», que adoptó la propuesta pero carece de legitimidad en los estatutos.
Pero a diferencia de Carme Chacón, que también forma parte de la ejecutiva federal y salió públicamente a dar la cara para cuestionar la intervención de la ejecutiva madrileña del PSOE, Besteiro se mantuvo fiel a su trayectoria, se autorrecetó prudencia y declinó todas las invitaciones para valorar en público lo ocurrido tras respaldar en privado a Pedro Sánchez.
Reparos en Galicia
Pero lo ocurrido en Madrid suscitó opiniones muy encontradas en las filas del PSdeG, pues buena parte de los dirigentes consultados -que solo accedieron a dar su opinión bajo el anonimato- le ponen grandes reparos a la arriesgada decisión patrocinada desde Ferraz.
Y es que entre los socialistas gallegos no falta quien sostenga que la destitución de la ejecutiva madrileña crea «inseguridade xurídica» en tanto que «non ten un claro reflexo nos estatutos do partido».
El pretexto utilizado para imponer una gestora en Madrid, que consiste en que la investigación judicial de un caso de corrupción en Parla que apuntaba hacia Tomás Gómez dañaba la imagen del partido y generaba inestabilidad orgánica, tampoco convence a los más implicados en las estructuras del PSdeG, debido a que este tipo de decisiones no tiene apenas precedentes. «¿Pero qué clase de criterio é este?», se preguntaba ayer un diputado autonómico. «Se ha actuado de manera discrecional y punto», señaló un dirigente local del partido.
Curiosamente, el PSdeG estuvo a punto de tomar una decisión muy similar a la de Madrid el pasado mes de septiembre, cuando Besteiro llegó a llevar a la ejecutiva gallega una propuesta para destituir a la ejecutiva de la provincia de A Coruña, con Caamaño al frente, para nombrar una gestora, decisión que después se aparcó para convocar primarias y hacer igualmente el relevo. La actuación contundente de Madrid todavía no entra en los usos y costumbres del PSOE galaico.