Madrigal toma posesión como la primera fiscala general del Estado de la democracia

Redacción / La Voz

ESPAÑA

Eligió como padrinos a sus dos predecesores, Eduardo Torres-Dulce y Cándido Conde-Pumpido

14 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Consuelo Madrigal Martínez-Pereda tomó ayer posesión de su cargo de fiscala general del Estado en el Salón de Plenos del Tribunal Supremo, lo que la convierte en la primera mujer en ocupar esa responsabilidad en la democracia española.

Madrigal eligió como padrinos a sus dos predecesores, Eduardo Torres-Dulce -quien dimitió el pasado diciembre- y Cándido Conde-Pumpido, en un acto presidido por el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes.

Sin discursos

En enero del 2012, Torres-Dulce tomó posesión en un acto en el que el entonces ministro Ruiz-Gallardón se comprometió en nombre del Gobierno a «garantizar la absoluta separación de los poderes del Estado». Gallardón dimitió en septiembre y apenas tres meses después se produjo la renuncia de Torres-Dulce. Ayer, ninguna autoridad pronunció un discurso durante la ceremonia.

Madrigal cuenta con una experiencia dilatada como fiscal y sus compañeros destacan su «profesionalidad» e «intachable» trayectoria. De talante conservador y católica practicante, no está afiliada a ninguna asociación de fiscales. En el 2008 firmó el manifiesto Mujeres ante el aborto, que rechazaba hablar de «un derecho al aborto y menos aún de un derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo». El pasado lunes, prometió su cargo ante el rey. Lo hizo ante un crucifijo, un ejemplar de la Constitución y una Biblia.

Nacida el 2 de noviembre de 1956, hasta ahora dirigía la Fiscalía de la Sala Coordinadora de Menores.