La jueza Beatriz Balfagón, siguiendo la línea marcada por quien la ha sustituido durante su baja, reiteró ayer las comisiones rogatorias remitidas a Andorra, que hasta ahora se ha negado a colaborar en la investigación al considerar que el juzgado barcelonés no ha aportado pruebas de que se estén investigando delitos al margen de fraude fiscal, condición sine qua non para que el principado preste su ayuda. La magistrada también se dirige a las autoridades de Liechtenstein, a las que solicita informaciones precisas sobre la investigación contra Jordi Pujol por blanqueo de capitales. El pasado octubre, Interpol Vaduz comunicó al juzgado que el juez Michael Jehle había abierto un procedimiento «por sospechas de blanqueo de dinero» contra «el que identifica como Jordi Pujol, nacido el 9 de junio de 1930».
Desde el pasado septiembre, Zita Hernández, sustituta de Balfagón, viene reclamando al expresidente un documento de algún tipo que pruebe que el dinero que está apareciendo en los dos principados tiene, efectivamente, su origen en la herencia de su padre. Sin embargo, el exjefe de Gobierno catalán no ha aportado ni un solo papel, sino que sus abogados, desde el principio, han tratado de torpedear la investigación, recurriendo por sistema las peticiones de colaboración internacional. Hernández llegó a denunciar públicamente en un auto la «falta absoluta de toda voluntad de Jordi Pujol y Marta Ferrusola de cooperar con esta instrucción», iniciada hace ya medio año.
La jueza insistió en varias ocasiones en que no se creía la versión de la herencia y recordó que el dinero aflorado por el clan es una «cantidad desorbitada», de la cual «se desconoce su origen» y que podría «no derivar de fuentes lícitas de renta». Una sospecha, explicaba en octubre, que crece por la insistencia de Pujol, su mujer y sus hijos en no dar explicaciones. La jueza recordaba entonces que los implicados podrían «aclarar con toda facilidad el origen lícito de tales fondos», pero hasta ahora «no solo no lo han hecho, sino que por parte de Jordi Pujol ni siquiera se ha cumplimentado el único requerimiento que se le ha dirigido, el correspondiente a aportar copia del testamento.