El PP mantuvo la presión sobre la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña para que presente de una vez la querella contra Artur Mas por la votación del 9-M. El portavoz popular en la Comisión Constitucional del Congreso, Pedro Gómez de la Serna, solicitó ayer que el proceso penal contra el presidente de la Generalitat se abra «cuanto antes» y demandó agilidad al ministerio público en Barcelona porque «no se puede eternizar» en el estudio de los hechos y en la tipificación de los delitos.
El diputado del PP, tras proclamar su respeto por «la independencia» de la Fiscalía, pidió «celeridad» y que la institución esté «a la altura de las circunstancias» para demostrar la fortaleza del Estado de derecho. También el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González se sumó a la petición de que interponga la querella de una vez.
Aunque no solo del PP partieron las urgencias, la líder de UPyD, Rosa Díez, se quejó de que igual «ya es un poquito tarde» para las querellas porque la votación ya se ha producido. Apuntó que lo que había que haber hecho es actuar con anterioridad para que no se vulnerase la suspensión dictada por el Tribunal Constitucional.
Pero también surgieron voces en sentido contrario. El exjuez Baltasar Garzón señaló que carece de sentido que la Fiscalía se querelle contra Mas porque puede provocar el efecto contrario al coadyuvar al fortalecimiento del independentismo catalán si el presidente de la Generalitat es inhabilitado para ejercer cargos públicos. «Sería un suicidio político» para los que están en contra de la independencia, dijo, y «la mejor ayuda» para los soberanistas, apostilló. La Fiscalía, entretanto, sigue estudiando la querella.
Desestiman la querella de UPyD
Mientras, la presentada por UPyD ante el Tribunal Supremo contra Artur Mas por la votación del 9-N fue desestimada. El alto tribunal alegó que no es competente en este asunto porque los hechos sucedieron en Cataluña y corresponde al Superior de Justicia de esa comunidad. Argumentó asimismo que «las repercusiones o trascendencia más allá de esa circunscripción», como sostuvo UPyD, «no alteran» que la competencia corresponde a la máxima instancia judicial catalana. La querella del partido de Rosa Díaz iba dirigida también a la presidenta del Parlamento autonómico y a varios miembros de la Mesa.