El presidente extremeño niega la información que provocó el escándalo y dice que efectuó otros 22 privados que pagó él
15 nov 2014 . Actualizado a las 08:54 h.José Antonio Monago no dimite. En una rueda de prensa en la que ha dado «el discurso más importante de su carrera política», el presidente de la Junta de Extremadura ha criticado haber sido sometido a un «linchamiento político», ha lamentado que se le haya negado «la presunción de inocencia» y ha querido desmentir la información que dio origen al escándalo. Dijo que no era verdad que hubiera viajado en 32 ocasiones a Canarias con fines privados. Y ha exhibido como prueba un certificado del Senado.
Según Monago, el documento de la Cámara Alta prueba que solo se desplazó en 16 ocasiones a las islas con cargo a fondos públicos. Y que todos esos desplazamientos y estancias se hicieron por trabajo. El presidente extremeño sí reconoce que hizo 22 viajes con fines privados. Pero dijo que los pagó él con su Visa. En la rueda de prensa ha puesto a disposición de los periodistas el extracto de su tarjeta de crédito.
Monago también ha aprovechado la rueda de prensa para anunciar que se presentará a la reelección en Extremadura.
El barón del PP lleva una semana envuelto en un escándalo político tras publicarse que viajó en reiteradas ocasiones a Canarias entre el 2009 y el 2010 para ver a su pareja, la colombiana Olga María Henao, que supuestamente había pagado con fondos públicos del Senado.
Según los datos publicados hace una semana, en su etapa como senador Monago efectuó hasta 32 desplazamientos pagados por la cámara. La oposición en Extremadura insiste en pedir que presente su dimisión o una moción de confianza. Conviene recordar que el PP gobierna la comunidad sin mayoría en el parlamento autonómico, sostenido por Izquierda Unida.
Viajes sin justificar
A la espera de lo que anuncie en su cita de hoy, PSOE y PP acercan posturas para llegar a un acuerdo sobre el sistema actual, por el que los diputados pueden trasladarse en avión, tren o autobús gratis a cualquier punto de España sin tener que justificar el desplazamiento, en unos desplazamientos que además son opacos. Ambos partidos coinciden en que deben establecerse reglas de supervisión. También coinciden en que los nuevos controles podrían comenzar a aplicarse ya en esta legislatura sin tener que abordar de inmediato un cambio del reglamento de la cámara, si no a través de un acuerdo de la Mesa. Sin embargo, populares y socialistas discrepan no solo sobre el grado de control sino también sobre el órgano que debe realizarlo.
¿Quién debe controlar los viajes?
Los socialistas son partidarios de que todo viaje que no sea a la circunscripción de origen del diputado o a su lugar de residencia deba ser justificado en un breve plazo por el parlamentario si no quiere asumir su coste. También reclaman que el control y supervisión de los desplazamientos sea competencia de la Mesa del Congreso
La propuesta inicial de los populares era menos rígida. Defendían que se pudiesen realizar sin una justificación explícita no solo los viajes a la circunscripción y al domicilio sino los que los diputados tienen que realizar a otras provincias por razones de representación, así como los que hacen a cargo del Congreso a actos, convenciones o mítines de su grupo político. Sí reclaman una revisión completa y una justificación de los que denominan como «viajes discretos», en principio encaminados a gestiones políticas delicadas y no públicas. Pero consideran que ese chequeo debe realizarlo cada uno de los grupos parlamentarios, que si da su visto bueno debería tener el aval automático de la Mesa
Sobre lo que el PP no ha dicho aún nada es sobre la reclamación explícita de UPyD e IU de que, además de control y justificación de los viajes, todos los desplazamientos sean publicados, incluso con su coste, en la página web del Congreso, cosa a la que el PSOE en principio no se opone
UPyD e IU ya le han pedido al presidente, Jesús Posada, que el asunto se discuta en la próxima Junta de Portavoces.