De igual modo, justifican que la Audiencia Nacional es competente para investigar estos hechos al tratarse de «defraudaciones o maquinaciones para alterar el precio de las cosas que produzcan o puedan producir grave repercusión en la seguridad del tráfico mercantil, en la economía nacional o perjuicio patrimonial en una generalidad de personas en el territorio de más de una Audiencia».
Reparto de papeles
El abogado Jaume Asens explicó en rueda de prensa que la familia Pujol Ferrusola se repartía los papeles, de tal modo que tres de los hijos -Jordi, Oleguer y Pere- se dedicaban a los negocios mientras que el padre y su hijo Oriol desarrollaban su actividad política. Además, ha asegurado que CDC estaba al caso de esta situación: «Este entramado no se entiende sin el apoyo implícito del partido o de una parte del partido. No nos creemos que nadie más lo supiese».
La querella señala que los hermanos Pujol Ferrusola ostentarían la titularidad de más de 50 empresas relacionadas con un amplio abanico de negocios que van «desde la explotación de clubes de golf, puertos francos, tratamientos de residuos, promociones inmobiliarias y sociedades patrimoniales, hasta refinerías petrolíferas o empresas de distribución eléctrica, dentro y fuera de España».