El rey firma su abdicación

La Voz LA VOZ / EUROPA PRESS

ESPAÑA

felipe
Juan Carlos Hidalgo

Juan Carlos I se funde en un abrazo con su hijo tras sancionar su última norma, la que regula el relevo en la Corona

19 jun 2014 . Actualizado a las 02:17 h.

Con la firma de rigor y un simbólico abrazo a su hijo, Juan Carlos I ha puesto fin esta tarde a 39 años de reinado. Ha sido en un corto acto en el Palacio Real, al que asistieron unos 160 invitados, y en el que se leyó el discurso que pronunció hace dos semanas cuando anunció su intención de abdicar y la ley aprobada por Congreso y Senado para posibilitar el relevo en la Corona.

Tras firmar la norma de abdicación, el rey se ha fundido en un abrazo con su hijo y se han intercambiado los asientos, un gesto simbólico del relevo en la Corona. Posteriormente, el rey ha recibido un beso de sus dos nietas y el impetú de que será la nueva princesa de Asturias, Leonor, ha hecho que Don Juan Carlos no resistiese en pie y se cayese sobre la silla que tenía detrás.

El tropezón ha sido la principal anécdota de un acto corto, solemne y en el que hasta hoy monarca se mostró especialmente nervioso y emocionado. Zarzuela ya había anunciado que sería un acto sin discursos pero que el rey, que no acudirá al acto de proclamación, quería incluir un gesto simbólico.

La ley de abdicación ha entrado en vigor esta misma medianoche, por lo que Felipe VI llegará siendo rey al Congreso de los Diputados en la mañana del día 19, cuando tendrá lugar la ceremonia de proclamación del nuevo monarca en una sesión solemne de las Cortes Generales.

El escenario elegido para este hecho histórico ha sido el Salón de Columnas del palacio. Se trata de la misma estancia donde se instaló la capilla ardiente del general Franco y, ya en democracia, donde se firmó el acta de adhesión de España a las Comunidades Europeas en 1985 o se celebró la conferencia de paz entre israelíes y palestinos en 1991.

Don Juan Carlos ha llegado en coche quince minutos antes de las 18.00 horas junto a la Reina Sofía y en otro vehículo viajaban los todavía Príncipes de Asturias. Al descender de los vehículos, ciudadanos congregados en las inmediaciones han gritado 'vivas' a la Familia real. A su llegada al Palacio Real, una compañía de la Guardia Real ha rendido honores al monarca con escuadra de gastadores, unidad de música, bandera y tres secciones. Se le han rendido honores con salvas de ordenanzas (21 cañonazos) y el himno nacional.

Ausencias

De la Familia Real, estuvieron presentes los Príncipes de Asturias y futuros monarcas, sus hijas las infantas Leonor y Sofía, la reina Doña Sofía, la infanta Doña Elena y sus tías por parte de padre, las infantas Doña Pilar y Doña Margarita. También acudieron el Gobierno en pleno, los miembros de las Mesas del Congreso y el Senado, los máximos representantes del poder judicial, y los presidentes autonómicos, con la excepción del presidente de la Generalitat, Artur Mas, y el lehendakari vasco, Iñigo Urkullu, quienes sí han confirmado en cambio su presencia al acto de proclamación de Felipe VI el día 19. Otra ausencia notoria será la de los portavoces parlamentarios de la Izquierda Plural, el PNV y el BNG, que han declinado la invitación que les ha cursado la Casa del Rey.

En representación del cuerpo diplomático acreditado en España estará presente el Nuncio de la Santa Sede, Renzo Fratini, que ejerce como decano. También estuvieron presentes los expresidentes del Gobierno Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero y los ponentes de la Constitución de 1978 Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, José Pedro Pérez-Llorca y Miquel Roca.

Salón de Columnas

El Salón de Columnas donde se firmó la ley de abdicación es uno de los recintos más utilizados dentro del Palacio Real. La arquitectura de esta sala es exacta a la de la Escalera Principal y se utilizó para celebraciones y banquetes hasta el año 1897, cuando al fallecer la Reina María de las Mercedes de Orleans, primera esposa de Alfonso XII, se situó en dicho salón el velatorio. Por este motivo se adecuó el actual Comedor de Gala en las estancias conocidas hasta entonces como Cuarto de la Reina María Amalia de Sajonia.

La estancia presenta un orden de pilastras lisas realzado con columnas adosadas de fuste estriado, coronadas con la representación del Toisón de Oro. Toda la simbología de este recinto está dedicada a realzar la majestad de la Monarquía Hispánica bajo el reinado de Carlos III. En la decoración de esta Sala tienen gran importancia las esculturas procedentes del antiguo Alcázar, edificio sobre el que, tras quemarse, se levantó el actual Palacio Real. Además, la decoración escultórica se completa con diversos bustos del siglo XVII representando a emperadores romanos. El Salón está iluminado por ocho arañas Isabelinas de bronce dorado y vidrio tallado de manufactura francesa.