Además, ha explicado que sobre el papel es posible que un presidente regional sea también secretario general del partido, aunque ha añadido que no es la opción que más le gusta personalmente. El exministro ha defendido la decisión de la dirección de convocar un congreso antes de organizar primarias para elegir candidato y cree que hay que asumir que habrá una «bicefalia» entre secretario general y candidato. Eso sí, cree que tendrá que ser una «bicefalia pactada» y, además, ha reconocido que es posible que una vez que haya un nuevo secretario general, las primarias se convoquen pero no se presente nadie más.