Tragedia de Alcalá de Guadaíra: La investigación apunta a un tóxico ajeno a la comida en las muertes de Sevilla

M. C. C. REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Doscientos vecinos de Alcalá de Guadaíra reclamaron más medidas sociales ante el ayuntamiento.
Doscientos vecinos de Alcalá de Guadaíra reclamaron más medidas sociales ante el ayuntamiento. R. C. < / span>Efe< / span>

Ni estaban en la indigencia, ni recogían alimentos de la basura, según familiares

17 dic 2013 . Actualizado a las 09:36 h.

La muerte fulminante de tres miembros de una familia sin apenas recursos económicos horas después de cenar, el pasado viernes, en su domicilio en Alcalá de Guadaíra conmocionó el país por la hipótesis inicial que apuntaba a que los fallecimientos se podían haber producido por la ingesta de pescado en mal estado recogido de contenedores de basura. Pero esta idea fue ayer descartada por la consejera de Sanidad andaluza, María José Sánchez Rubio, que reveló que los primeros datos de la investigación apuntan a un agente tóxico detectado en el domicilio de la familia como la causa que originó la tragedia.

«Atravesaban una situación difícil, pero no como para tener que recurrir a los contenedores», afirmó categórica Sánchez Rubio, quien confirmó que la familia tenía en su casa alimentos en buen estado y adquiridos en establecimientos. Un extremo al que también se refirió el portavoz de la familia, Miguel Ángel López, para recordar que los alimentos fueron comprados en tiendas de la localidad ante la llegada de la Navidad. También señaló que el padre había prometido a sus hijas -una de ellas muerta y la otra hospitalizada- sus regalos de Reyes.

A pesar de ello, nadie pone en duda que los Cayo Bautista atravesaban por una situación económica crítica desde que el padre, fontanero de profesión con empleados a su cargo, se quedó en paro hace dos años. Hasta ese momento eran una familia de clase media a la que las cosas les iban relativamente bien, pero la crisis les cambió la vida. Ya no podían pagar los gastos del piso, que estaba embargado, ni de una furgoneta que utilizaban en sus desplazamientos. La familia solo recibía 426 euros de la Renta Activa de Inserción, aunque esta ayuda se terminaba a comienzos del próximo año, de ahí que hubieran solicitado el salario básico que concede la administración regional andaluza.

Parada cardiorrespiratoria

El informe preliminar de la autopsia certifica que las muertes se produjeron por parada cardiorrespiratoria, aunque no identifica qué la causó. Las primeras investigaciones apuntan a una posible toxiinfección de la que se ha librado la hija menor del matrimonio, de 13 años, y que permanece ingresada en un hospital sevillano. La joven fue la única que no comió pescado, la noche del viernes.

Las pruebas microbiológicas y toxicológicas tardarán aún al menos unos días, según confirmó la consejera andaluza de Salud, María José Sánchez Rubio, quien quiso lanzar un mensaje de tranquilidad a la población asegurando que la alerta sanitaria se mantendrá vigente hasta que acabe la investigación. También informó de que no se han dado más casos, ni siquiera leves, por lo que todo se centra en el domicilio de los Caño Bautista y en algún producto que pudieran estar mezclado con los alimentos.

Asimismo, quiso salir al paso de las criticas por la actuación de los servicios sanitarios de urgencias, que han motivado incluso una denuncia ante la Fiscalía por parte de la organización Defensor del Paciente al entender que se perdieron horas que «podrían haber sido fundamentales para salvarles la vida» a las víctimas. Sánchez Rubio detalló que tras la primera comunicación solo la menor fallecida presentaba síntomas, por lo que recomendaron que si no mejoraban volvieran a llamar. Así lo hicieron ya en la mañana del sábado, pero al entrar en el domicilio los servicios de emergencias encontraron a la chica de 14 años en parada cardiorrespiratoria, y al padre y la madre, de 61 y 50 años, muy graves, por lo que decidieron trasladarlos a todos al hospital, donde fallecieron.