Tragedia en Alcalá de Guadaíra: La familia que falleció intoxicada consumió pescado en mal estado

La Voz AGENCIAS

ESPAÑA

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La pareja llamó a emergencias por lo que fueron examinados por un médico que no vio necesario su traslado a un hospital

16 dic 2013 . Actualizado a las 12:14 h.

Desde que el cabeza de familia, fontanero de profesión, se quedó en el paro, la familia que falleció este sábado a causa de una intoxicación sobrevivía de lo poco que el matrimonio ganaba de la recogida de cartones y ropa vieja en las calles, y gracias a la comida caducada que les regalaban en la localidad sevillana de Alcalá de Guadaira. Su piso había sido embargado por el banco ante el impago de la hipoteca aunque aún no se había ejecutado se desahucio

El pasado viernes, la pareja y sus dos hijas, de 14 y 13 años, cenaron pescado. Al poco tiempo los cuatro comenzaron a sentir nauseas y diarrea por lo que hicieron una llamada a emergencias. Alrededor de las dos de la madrugada una ambulancia se trasladó al domicilio y un médico examinó a los cuatro miembros de la familia aunque no vio necesario su traslado al hospital. Ya por la mañana el padre logró levantarse de la cama. Encontró a su hija de 14 años muerta y a la otra en estado muy grave. A pesar de ser atendidos de urgencia, los médicos ya no lograron salvar su vida y la de su esposa. La otra menor tuvo que ser ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital infantil Virgen del Rocío, en Sevilla, aunque evoluciona de forma favorable.

El caso se encuentra ahora bajo secreto de sumario mientras que el juez que se ha hecho cargo de la investigación está a la espera del resultado de las autopsias y el análisis de las muestras de alimentos recogida en el domicilio con el fin de conocer la causa de las muertes.

Posible negligencia médica

Familiares de las víctimas han solicitado explicaciones a la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía acerca de la atención que recibieron los fallecidos y han anunciado que no descartan adoptar medidas legales en el caso de que se produjera alguna negligencia médica al no haber sido ingresados cuando fueron examinados por primera vez.

Culpa de los recortes Dirigentes del PSOE e IU achacaron este domingo las tres muertes a los efectos de la crisis. «La crisis está haciendo que haya más ricos y más millonarios de los que había antes, pero también que haya muchas más familias por debajo del umbral de la pobreza», afirmó el secretario general de los socialistas madrileños, Tomás Gómez. «Siempre ganan los mismos, los banqueros y las élites económicas, y pierden la gente y la mayoría», añadió.

Antonio Maíllo, coordinador general de Izquierda Unida en Andalucía, fue más allá y acusó de los fallecimientos al Gobierno de Mariano Rajoy y su política de recortes. Según Maíllo, «hay que exigir una investigación de cómo ha podido ocurrir, cuál era la atención que tenía esta familia, si es que la tenía, y afrontar hasta dónde llegan las políticas de recortes que conducen a la no recuperación y a la no salida de la crisis»

A pesar de las dificultades económicas por las que atravesaba la familia, el ayuntamiento de Alcalá de Guadaira aseguró que el matrimonio nunca solicitó ayuda a la Concejalía de Asuntos sociales. Fuentes municipales adelantaron que el Consistorio se hará cargo de los entierros.

Cáritas afirma que no atendía a los fallecidos desde hace dos años

Las parroquias y Cáritas del arciprestazgo del municipio sevillano informaron, por su parte, de que la familia lleva sin ser atendida por esta asociación «desde hace al menos dos años». A través de un comunicado, Cáritas señaló que los alimentos que podrían haber provocado la muerte de tres vecinos de Alcalá «en ningún caso tienen su procedencia en el reparto de productos alimenticios que habitualmente realizan las Cáritas parroquiales» de esta localidad.

Tras lamentar el «tristísimo suceso», dar el pésame a los familiares y desear el restablecimiento de la joven ingresada en el hospital, la asociación señaló que los alimentos que reparten las seis Cáritas parroquiales de Alcalá «reúnen las condiciones sanitarias (procedencia, envasado, etiquetado y fecha de caducidad) que los hacen perfectamente útiles para el consumo humano». «Desde las parroquias de Alcalá y desde sus Cáritas parroquiales, queremos hacer un llamamiento a la responsabilidad de todos, para que hechos como el ocurrido en estos días no vuelvan a suceder», recalcó la organización.

Cáritas instó además en su comunicado a los poderes públicos municipales a que pongan a disposición de la ciudadanía todos los medios que estén a su alcance, económicos y humanos, y que aceleren los trámites burocráticos para que las personas necesitadas puedan disponer de las ayudas necesarias.