Moncloa asegura que todo es una estrategia de Bárcenas para desviar la atención

Agencias

ESPAÑA

Defiende que el extesorero no consiguió nada de lo que pedía a Rajoy

14 jul 2013 . Actualizado a las 18:06 h.

Las reacciones ante la publicación de una serie de mensajes telefónicos que supuestamente se habrían enviado el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el extesorero del PP, Luis Bárcenas, entre el 2011 y el 2013 no se han hecho esperar.

El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha convocado para esta mañana en la sede del partido en Ferraz una reunión de urgencia con miembros de la dirección socialista, trase stas últimas revelaciones del caso Bárcenas.

Según ha informado el PSOE en un comunicado, a la reunión acudirán la vicesecretaria general, Elena Valenciano, el secretario de Organización, Óscar López, el secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica, Antonio Hernando, la portavoz parlamentaria, Soraya Rodríguez, y el secretario general del Grupo Socialista, Eduardo Madina.

Estrategia para desviar la atención

Por su parte, el Gobierno considera que la divulgación de los mensajes responde a una estrategia de Bárcenas para desviar la atención de sus problemas con la Justicia y demuestra que no consiguió nada de lo que pedía al presidente del Gobierno.

Fuentes del Ejecutivo subrayan que divulgar ahora esos mensajes hace patente la existencia de una clara estrategia para que, ante sus problemas con la Justicia y las explicaciones que tiene que dar sobre los 48 millones de euros que tenía en Suiza, se hable de otros asuntos.

En esa línea, el Gobierno expresa su sorpresa por el hecho de que Bárcenas haya guardado mensajes de texto de ese tipo durante varios años, lo que cree que certifica que había una estrategia predefinida para usarlos ante sus problemas judiciales.

Insisten las fuentes en que la lectura de esos mensajes sólo lleva a una conclusión: no ha conseguido nada de lo que solicitaba al presidente del Gobierno.

Asimismo, subrayan que el hecho de que el extesorero del PP esté en prisión es una clara demostración de que no ha tenido ningún tipo de protección por parte del Gobierno.

Rajoy podrá expresar mañana en público su opinión ante estos mensajes en la rueda de prensa que ofrecerá en el Palacio de la Moncloa junto al primer ministro polaco, Donald Tusk, al término de la IX cumbre bilateral. Será en la ronda de preguntas cuando los periodistas podrán pedir al jefe del Gobierno su opinión sobre esos mensajes y sobre otras acusaciones de Bárcenas en torno al supuesto cobro de sobresueldos ilegales o una financiación ilegal del PP.

La última vez que Rajoy habló públicamente sobre el caso Bárcenas fue el pasado 3 de julio, en Berlín, cuando dijo que no quería hacer comentarios sobre este asunto o sobre otros, como el caso de los ERE en Andalucía, para no condicionar las decisiones judiciales.

Rajoy está «con un ojo en la cárcel y otro en la prensa»

El portavoz de IU-ICV-CHA, José Luis Centella, ha insistido en pedir la dimisión del jefe del Ejecutivo y el adelanto de las elecciones generales, al considerar que España no puede tener un presidente «con un ojo en la cárcel y otro en la prensa».

A su juicio, los mensajes publicados demuestran que las relaciones entre Rajoy y Bárcenas han durado hasta «hace muy poco tiempo» y que el jefe del Ejecutivo «mintió» al decir que no tenía contacto con el ex tesorero.

Según Centella, Rajoy está «con un ojo en la cárcel y otro en la prensa», pendiente de lo que dice Bárcenas y de lo que publican los medios de comunicación, cuando lo que el país necesita es un presidente «con los dos ojos en la crisis».

Así las cosas, su criterio es que Rajoy no puede continuar como presidente del Gobierno y que «mañana mismo» debería convocar elecciones y luego dimitir, porque «ha mentido y no tiene ninguna credibilidad». «Nadie debe tener miedo a las urnas», ha agregado Centella, y ha advertido de que lo conocido hasta ahora del caso Bárcenas puede ser sólo «la punta del iceberg».