Griñán se ofrece a dar explicaciones sobre los ERE en la Cámara regional

Cecilia Cuerdo SEVILLA / COLPISA

ESPAÑA

El PP insiste en situar al presidente andaluz como «el cajero de la trama»

26 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El presidente andaluz, José Antonio Griñán, salió ayer al paso de las acusaciones del PP que lo sitúan como «el cajero de los ERE» por su papel como consejero de Hacienda en la época en que se produjeron las irregularidades. El gobernante y líder de los socialistas andaluces mostró su disposición a dar explicaciones sobre el fraude «donde sea», y mientras se aclara si podrá hacerlo en el Congreso, como quiere el PP, anunció que acudirá de nuevo la próxima semana en el Parlamento regional.

La comparecencia de Griñán de ayer estaba prevista inicialmente para hacer balance del año transcurrido desde las últimas elecciones autonómicas, en las que el PP fue la fuerza más votada pero no alcanzó el poder de merced al pacto de PSOE e IU. Pero la operación policial de la semana pasada en el marco del caso de los ERE y el cerco de los populares al presidente convirtió el escándalo en el eje de su intervención.

La investigación parece centrarse ahora en el cobro de sobrecomisiones, el «verdadero negocio de las ayudas», según la jueza Mercedes Alaya, y no tanto en el marco jurídico que amparó esas concesiones. Sin embargo, el PP hace hincapié en esta parte y quiere que Griñán explique en el Congreso por qué como ministro de Trabajo aprobó una normativa más estricta para dar ayudas y no la aplicó en Andalucía. «Es imposible organizar una trama de saqueo sin la complicidad por acción u omisión del presidente de la Junta, del que está ahora, del que estuvo de consejero o del expresidente» Manuel Chaves, apuntó el secretario general del PP andaluz, José Luis Sanz.

«No se puede usar la corrupción para tapar más corrupción», fue la respuesta de Griñán, en alusión a que el PP sobredimensiona el fraude de los ERE para esconder el caso Bárcenas. Así, se mostró convencido de que el uso de este tipo de escándalos como arma electoral «envilece el debate ya que se cae en la insidia y la calumnia». Aseguró tener «la conciencia muy tranquila», dado que todas las ampliaciones de la partida de los ERE se hicieron conforme a la ley y con informes favorables de la Intervención General. Por tanto, «no hay argumento legal posible» para verse imputado.

Griñán recordó que ha comparecido en 12 ocasiones en el Parlamento y que su Gobierno contestó 476 preguntas sobre las ayudas irregulares. No obstante, lo hará de nuevo en la próxima sesión plenaria e incluso, si lo permite el reglamento, en las Cortes. Es más, a Griñán le «encantaría» que hubiera una comisión parlamentaria de investigación conjunta de los casos Bárcenas, Gürtel y ERE en el Congreso, «donde compareciéramos todos, presidentes, ministros y consejeros».

Fuentes socialistas ven difícil que el Parlamento admita analizar la función de un ministro con carácter retroactivo.