Bárcenas y Sepúlveda compartían una sociedad para evadir capitales

Melchor Saiz-Pardo MADRID / COLPISA

ESPAÑA

La cerraron precipitadamente solo un mes después de estallar el caso Gürtel

13 feb 2013 . Actualizado a las 11:22 h.

El exmarido de Ana Mato no solo habría recibido presuntamente casi medio millón de euros de Francisco Correa, además de coches, viajes gratis para su familia y fiestas. Jesús Sepúlveda, cuando todavía estaba casado con la ministra de Sanidad, fue socio de Luis Bárcenas en una empresa sin ninguna actividad que, según la Policía Judicial, no era más que más que una pantalla diseñada para evadir capitales. Y no solo eso, mientras el extesorero del PP amasaba una fortuna cercana a los 22 millones, Sepúlveda participó con él en una segunda sociedad mercantil, cuyo nombre aparece en la comisión rogatoria remitida por las autoridades helvéticas y que comparte sede con la compañía supuestamente usada por Bárcenas para desviar dinero a Argentina.

La Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) alertó de la existencia de esta maraña societaria tejida por Bárcenas y Sepúlveda primero al juez Baltasar Garzón, que pidió seguir investigando, y luego al Tribunal Superior de Madrid, que decidió no profundizar en el asunto y terminó archivando las imputaciones contra el extesorero del PP.

La Udef reveló entonces que Bárcenas mantenía «relaciones societarias» con Sepúlveda, por entonces marido de Mato, y con el también imputado Jesús Merino «a través de la sociedad Astrolago de Inversiones». Esa firma, creada el 27 de abril del 2006, era propiedad al 33 % de los tres socios y estaba dirigida por Ana Isabel Gutiérrez, mujer de Merino, quien era «administradora única» de la firma. Fundada como una «sociedad limitada» con apenas 9.000 euros de capital, tenía como objeto social las «actividades inmobiliarias». Sin embargo, nunca se dedicó a nada; o al menos, a nada legal. La advertencia de la Policía Judicial al entonces instructor del caso Gürtel, Antonio Pedreira, era clara: Astrolago era una tapadera para evadir. La Udef, tras estudiar los movimientos de esa empresa, aseguró que «se desprende que no responde a un criterio lógico la adquisición de participaciones en una sociedad que carece de actividad real en el mercado y que en España carece de propiedades o bienes tangibles».

La sociedad de Bárcenas y Sepúlveda, señalaba el informe policial, es «un mero instrumento para canalizar la titularidad sobre unos bienes o derechos ubicados en otros países, de tal forma que consigue ocultar la verdadera naturaleza de la participación societaria». El juez Pedreira, a pesar de este segundo aviso, no ordenó más investigaciones sobre la supuesta trama internacional para la evasión de capitales de Sepúlveda y Bárcenas, que ahora se ha visto confirmada. Astrolago, tras tres años de vida y sin actividad legal en España, echó el cierre de manera precipitada solo un mes después de que estallara el caso Gürtel. El 30 de marzo del 2009, Gutiérrez extinguió la sociedad.

Servicios informáticos

Pero Astrolago no era la única sociedad que compartieron Bárcenas y Sepúlveda. La Udef avisó de que ambos participaban en el capital de Netcheck. En los mismos documentos en los que el Dresdner Bank desvelaba que el extesorero llegó a tener 22 millones de euros en Suiza, reveló que Bárcenas intentó justificar el gran volumen de dinero que movía en el extranjero apelando a su participación en numerosas empresas, entre ellas Netcheck, una firma de servicios informáticos que tiene su sede en el mismo piso que la empresa sin actividad que Bárcenas creó en la primavera de 2011 y que habría usado para desviar capitales a Argentina.